La diabetes es una enfermedad que requiere de un monitoreo, por lo que para conocer el estado del nivel de azúcar le realizan un pinchazo en la yema de los dedos que puede ser bastante doloroso. Pero, ¿te imaginas utilizar la tecnología para no tener que realizar este procedimiento para conocer el estado del paciente?
Un equipo de investigadores del prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts y de la Escuela de Medicina de Harvard, ambas de Boston, Estados Unidos, han creado un sensor flexible a modo de tatuaje temporal, que utiliza una suave corriente eléctrica para medir los niveles de glucosa en el organismo de una persona. Información compartida en El País.
Sin duda la tecnología nos sorprende cada día más, pero en esta oportunidad se ha inventado algo que busca mejorar la calidad de vida los pacientes con diabetes, a través de la propuesta de tatuajes inteligentes.
“Actualmente el sensor del tatuaje puede sobrevivir fácilmente por un día y por lo tanto pueden ser reemplazados. Además, son muy baratos, por lo que no tienen mucha carga financiera para el paciente”, explica Amay Bandodkar, líder del estudio.
Para comprobar que este tatuaje si es efectivo, los científicos los han probado con éxito en siete pacientes sanos de entre 20 y 40 años de edad. Es más, el dispositivo midió incluso con mayor precisión los niveles de glucosa de cada paciente que la clásica punción digital.
Asimismo, para complementar este nuevo prototipo, expertos están trabajando para que este tatuaje temporal tan innovador para diabéticos tenga “capacidades Bluetooth para enviar esta información directamente al médico del paciente en tiempo real o incluso almacenar datos en la nube”, aclara Bandodkar.
En el caso del pH ácido, este indica que una persona está más propensa a problemas crónicos como la obesidad, la migraña o la misma diabetes, mientras que el sodio aumenta si la presión arterial lo hace y si existe desestabilidad en el sistema nervioso.
Cabe mencionar que, este nuevo prototipo que lleva por nombre DermalAbyss se encuentra en etapa de experimentación. Sin embargo, al parecer más pronto de lo que se cree será utilizado como una herramienta médica que facilite la vida de las personas con padecimientos crónicos como la diabetes y la hipertensión.