Siempre se ha escuchado que “el cuerpo avisa” cuando se trata de una enfermedad. Pues bien, esto fue confirmado por investigadores de la Universidad Internacional de Cataluña (UIC) en España, quienes descubrieron que si entre 3 o 7 días aumentas la cantidad de grasas, activas signos de alerta en el cerebro.
A partir de este descubrimiento, los científicos proponen tratar el sobrepeso de forma distinta de acuerdo con el género de la persona, pues los ratones en los que se realizaron los estudios en el laboratorio, reaccionaron diferente según fueran machos o hembras.
También, trabajar en métodos de prevención de enfermedades como la obesidad desde el cerebro.
En el estudio científico realizado por el Grupo de Investigación de Neurolípidos de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la UIC, vieron que tanto el sistema endocannabinoide, que se encarga de regular la homeostasis energética, está relacionado con el desarrollo de la obesidad, como la grasa marrón que realiza el proceso de termogénesis que influye en el peso del cuerpo.
Este estudio fue publicado en la revista Journal of Lipid Research, donde la investigación evidencia como respuesta al exceso de la alimentación un aumento de los endocannabinoides en el hipotálamo, región cerebral que controla el apetito y el metabolismo corporal, así como una mayor actividad de la grasa marrón encargada de incentivar el consumo de calorías para adelgazar.
A la par, se miró que la respuesta fue mayor en los ratones hembras que en los machos, lo que reflejaría que las mujeres tienen una protección mayor frente a la obesidad que los hombres.
"Comprobamos que cuando se ingieren estas grasas en periodos reducidos de tiempo, se producen diferencias por sexos", señala el estudio.
"Los niveles de endocannabinoides detectados son más altos en el caso de las mujeres", mencionó la Dra. Rosalía Rodríguez, una de las autoras del estudio.
Una de las científicas, Núria Casals, explicó que estas señales de alerta del cerebro solamente se identificaron cuando la obesidad es inicial y no en fases avanzadas de la patología. Por ello, se debe trata la enfermedad con la prevención y de forma distinta según sea el género de la persona.