Llegado a los 30 años las mujeres comienzan a sufrir cambios en su cuerpo que afectan su salud y rendimiento en los quehaceres diarios. Por ejemplo, agacharse repetidas veces, cargar objetos muy pesados o simplemente tener una mala postura al momento de dormir, todo eso influye y generan dolores lumbares.
Un estudio de Center Watch, en California, reveló que el dolor de espalda se origina por:
- Mala postura al dormir, sentarse o pararse.
- Sobrepeso y obesidad.
- Estrés y depresión.
- Artritis y osteoporosis.
Sin embargo, si aún no sabes como tratarlos, en esta nota te dejamos cuatro remedios caseros que son muy efectivos. No olvides que si el dolor es repetitivo y persistente debes buscar a un especialista para que te revise a detalle.
Mezcla aceite de oliva con flores frescas de manzanilla en todo el frasco. Ciérralo y déjalo reposar por dos semanas. Pasado el tiempo recomendado, guárdalo en el refrigerador y utilízalo cuando sientas dolor.
Exprime tres limones y agrega una pizca de sal. Los especialistas recomiendan que se consuma dos veces al día. Es una bebida poderosa en vitamina C y ayuda a calmar los dolores de espalda.
Coloca dos ramas de romero en un litro de alcohol y déjalo reposar por siete días. Después, úsalo para realizarte masajes en la columna antes de dormir.
Hierve dos cucharadas de salvia en un litro de agua por 10 minutos. Una vez frío bébelo dos veces al día. Es muy efectivo para desinflamar y aliviar el dolor.