Nuestro cuerpo es maravilloso y siempre sabe cómo protegerse y nos avisa si hay algún elemento externo que nos podría causar alguna enfermedad. Muchas veces ignoramos estas señales que advierten del peligro porque podríamos creer que no son importantes, pero que esconden más de lo que crees.
La picazón es una respuesta a la liberación de mediadores inflamatorios causado por diversos factores. Aquí te dejamos la lista.
Se trata de una inflamación de la piel y puede ser dos. La primera es dermatitis atópica que se produce por la resequedad de la piel, cuya picazón es leve a moderada. En tanto, la dermatitis de contacto es por una mala condición de la piel y puede ser producto de la irritación por algún material específico cuya comezón es moderada.
Estos trastornos emocionales pueden generar comezón leve (como si un insecto caminase sobre tu piel) o escoriaciones neuróticas producto de las lesiones por rascarse.
Uno de los síntomas es la picazón como reacción a las sustancias que libera cada enfermedad en nuestro organismo. Estas se producen por la irritación de las terminaciones nerviosas.
El cáncer al sistema linfático genera una picazón crónica, esta parece no tener causa aparente y se enrojece.
Esta enfermedad es causada por hongos que atacan la piel y las uñas generando escozor, descamación y heridas.
Tales como mononucleosis, diabetes, síndrome carcinoide, alteraciones en las tiroides.
Algunas medicinas tienen químicos que generan esa reacción, entre ellos están los opioides, morfina y el tramadol. Esto también puede ser resultado de una alergia a los mismos.
Te recomendamos que no te rasques más pues solo crearás escoriaciones que terminarán en cicatrices, lo que debes hacer es acudir al médico para que determine las causa que generan esa reacción. Probablemente te receten antihistamínicos.