La llegada de las vacunas contra la COVID-19 a nuestro país fueron noticias esperanzadoras; sin embargo, no lo eliminarían por completo. Pero sí podría convertir al coronavirus en una enfermedad endémica, es decir, la inoculación la podría controlar. Esas fueron las conclusiones de un estudio de la Universidad de Oxford.
A través de un podcast que tiene en CNN en español, el doctor Elmer Huerta analizó los resultados de la Encuesta de Infección Covid-19 de la Universidad de Oxford del Reino Unido.
Según reveló el médico, este estudio nos da un atisbo de lo que podría ser el futuro de la pandemia.
Lo resultados de este estudio, en el que se comparó a personas que recibieron la primera dosis de la vacuna contra individuos no inoculados y que nunca habían tenido la enfermedad, muestran que la probabilidad de que una persona se infecte con el SARS-CoV-2 se redujo en un 65%, y en un 70% después de recibir la segunda dosis.
Sin embargo, hubo un mayor impacto, ya que las personas que recibieron las dos dosis, redujeron a un 90 % la posibilidad de desarrollar la enfermedad con síntomas y que la carga viral de los infectados era mucho menor, lo que lo hace menos contagioso.
En este mismo estudio analizaron la variante B.117, descubierta en el Reino Unido, la cual fue sensible a las vacunas estudiadas.
Por lo tanto, “los autores concluyeron que la vacunación con una dosis de la vacuna de Oxford/AstraZeneca o de Pfizer-BioNTech, o con dos dosis de Pfizer-BioNTech, redujo significativamente las infecciones nuevas, las infecciones sintomáticas y la carga viral de las personas infectadas con SARS-CoV-2 en esta muestra representativa de la población del Reino Unido”, analiza el dr. Elmer Huerta.
Asimismo, “el estudio nos da un atisbo de lo que podría ser el futuro de la pandemia, una enfermedad que nunca desaparecerá, pero que, gracias a la vacunación, ya no tendrá la explosión de casos y de muertes que estamos sufriendo ahora”, finalizó.