Debido al incremento de pacientes COVID-19 en estado crítico, las camas en Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) continúan ocupadas en su totalidad. Ante esta situación, la cifra de fallecidos por esta enfermedad continúa en ascenso de manera abrupta tras el levantamiento de la cuarentena obligatoria.
Esta situación causó la muerte del brigadier PNP Alejandro Sánchez Solís, quien prestó sus servicios a su institución por 29 años.
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Según testimonio de sus familiares, Sánchez Solís contrajo el COVID-19 en acción de trabajo, tras lo cual fue llevado al Hospital Central de la PNP. Alli le entregaron un kit médico sin receta y lo regresaron a su domicilio.
Tras sufrir complicaciones, su familia lo llevó al hospital policial Augusto B. Leguía del Rímac, donde recibió oxígeno medicinal en un patio del lugar. Lamentablemente no resistió y falleció por COVID-19 mientras esperaba una cama UCI.
En diálogo con Latina Noticias, la viuda del brigadier Sánchez narró el drama que vivió con la sanidad policial. "Todos entran y salen muertos, y nadie dice nada. Están saliendo muertos, todos los días", dijo.
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Por lo que sabemos hasta ahora, el perfil con mayor riesgo a esta enfermedad incluiría a varones mayores de 60 años con patologías crónicas sobre todo de tipo cardiovascular, o bien con factores de riesgo cardiovascular, como son hipertensos, diabéticos y fumadores, y también el riesgo sería mayor en personas con cáncer o con problemas respiratorios crónicos.