Hace unos días finalizaron los Juegos Panamericanos Lima 2019. Sin embargo, el magno evento deportivo dejó muchas historias que demuestran que el único obstáculo que tenemos para no cumplir nuestras metas, somos nosotros mismos.
Una de estas historias motivadoras es la de Mayte Salinas, una clavadista chilena que decidió representar al Perú en el evento deportivo más grandes de América, Juegos Panamericanos.
Hasta hace un año y medio la deportista representaba a Chile y sus compatriotas tenían grandes expectativas puestos en ella. Incluso, la joven ostentaba el récord nacional de trampolín tres metros de su país.
Mayte Salinas quería representar a su tierra natal en grandes eventos como los Juegos Panamericanos. Sin embargo, terminó formando parte de la delegación peruana por la falta de apoyo de la Federación chilena.
“En Chile, las federaciones que no son de fútbol solo se enfocan en sus problemas, no ayudan al deportista. El contexto que viví me desmotivó totalmente. Estaba triste, aburrida con la situación. A veces lloraba de impotencia porque siempre di lo mejor de mí, pero nunca hubo apoyo”, menciona Salinas en una entrevista con el diario “El Comercio”.
La deportista de 20 años, de padre chileno y madre peruana, señala que en nuestro país le ofrecieron el apoyo que necesitaba y que priorizó su crecimiento porque ama su deporte.
“En el Perú me ofrecieron algo mejor, un proyecto. Por eso me vine, prioricé mi crecimiento”.
Pero, ¿quién motivo a Salinas a que represente al Perú? Pues fue Alfredo Borges, el entrenador venezolano que Mayte admira.
“Cuando se enteró que estaba acá, decidió venir también. Hizo los trámites de su nacionalización y la estamos puliendo, porque la formación que recibió allá no fue la adecuada, pero ha ido progresando”, contó el técnico a “El Gráfico” de Chile.
La clavadista, quien es multimedallista sudamericana Medellín 2016, mencionó que en sus competencias en los Panamericanos Lima 2019 “tenía muchas emociones juntas. Estaba nerviosa por mi estreno luego de tanto tiempo, pero a la vez feliz porque mi familia llegó para apoyarme. Además, nunca había visto tanto público en un torneo de clavados. Lamento no haber conseguido el objetivo, pero prometo esforzarme mucho más en adelante”.