Son muchas las palabras que sabemos que llevan acento, como árbol, último, camión y es que conocer las reglas del juego. No obstante, la Real Academia Española comunicó mediante un tuit, que recibe muchas consultas de palabras con tilde, que en realidad no la lleva. Entre ellas, están: tí, líbido, dió, fé, fué, truhán. Además, ó, quórum, contínua, sinó, ésto, exámen, incluído, asímismo, pié y vió. A través de un mensaje por la misma vía la institución aclaró que no llevan.
Obviamente, debe existir una razón para confundirnos, aquí te damos una idea de por qué.
Se pronuncian con dos sílabas, pero son monosílabos desde el punto de vista ortográfico. No es raro pensar que estas palabras llevan tilde porque en palabras de dos sílabas, agudas y terminadas en "n", habría que poner tilde. Pero no.
El pronombre personal "ti" nunca lleva tilde. Este error se debe a que los pronombres personales "mí" y "sí" llevan tilde, para marcar la diferencia.
Esta palabra, que significa "deseo sexual", no es esdrújula. No hay que confundirla con "lívido", con "v" y que significa "amoratado" o "intensamente pálido".
Todas estas palabras son monosílabas. Y los monosílabos solo llevan tilde si sirve para diferenciarlas de otras palabras que se escriben igual.
Hasta 2010 la conjunción "o" se escribía con tilde cuando iba entre cifras. Desde entonces, la tilde en "o" entre números se considera incorrecta.
Es un caso que llama al error. "Quorum", sin tilde, es una palabra en latín. En castellano sería "cuórum". Y "Quórum" no está aceptada por el diccionario.
Ningún pronombre demostrativo lleva tilde. Ni "esto", ni "este", ni "ese", ni "esa", ni ningún otro. Hace años lo hacían.
El diptongo "ui" en palabras graves no lleva tilde. Al pronunciarlo la u suena separada de la i, pero es un diptongo en la escritura.
Ninguna de estas palabras lleva tilde. Son simplemente palabras graves terminadas en n, s o vocal, según la antigua regla ortográfica.