La estimulación temprana consiste en proporcionar al bebé las mejores oportunidades de desarrollo físico, intelectual y social para que sus capacidades y habilidades le permitan ser mejor de lo que hubiera sido sin ese entorno rico en estímulos intelectuales y físicos de calidad.
Por ello, para llevar cabo una estimulación adecuada es necesario que el bebé cuente con una persona de referencia que le brinde todo lo necesario para su bienestar y, en ese punto es importante la presencia de los padres.
Para María Algueró, experta en atención temprana, masaje y comunicación infantil, se debe tener en cuenta cada etapa del desarrollo en la que se encuentra el bebé. Así que, atenta a este artículo que te mencionamos algunas de las iniciativas que los padres pueden poner en marcha.
- Aprender a imitar las muecas de la madre será fundamental para en un futuro reconocer las emociones y estimular el lenguaje
- Los masajes estimulan el sistema inmunológico y le protegen de enfermedades; además de favorecer un buen vínculo afectivo
- Chupar objetos o su mano les calma y les relaja
- Las canciones le relajarán, le divertirán y estimulará su audición
- Los mordedores le vendrán bien para experimentar con la boca
- Aprovechar el cambio de pañales para hacer ejercicios de piernas
- Estimúlale mediante caricias manteniendo contacto visual
- Bailar o balancearse con el bebé en brazos les da tranquilidad y les gusta
- Estimular su cuerpo con diferentes texturas, le ayudará a ir reconociendo texturas, ya que la piel es el sentido que más información les transmite
- Cuando el bebé se encuentre recostados podemos hacer movimientos suaves de sus piernas mientras le hablamos o le cantamos.
- Hacer ejercicios como levantarle de los dos brazos desde donde se encuentra recostado o sentado le hará fortalecer los músculos dorsales
- Déjale chupar objetos y llevárselos a la boca para investigarlos
- Ponte delante del bebé e imita sus sonidos, ya verás cómo le gusta y te responde.
- Cuéntale lo que ves y lo que haces con detalle, de este modo alimentarás su curiosidad.
- Ayúdale a reforzar los músculos del tronco con juegos que le hagan girarse sobre sí mismo, acércale juguetes para que los alcance desde la posición de sentado apoyado en cojines.
- Haz gestos para que te imite.
Cabe mencionar que es importante actuar con precaución y cautela, ya que algunos bebés no se muestran receptivos a dos actividades a la vez, por lo que es mejor ir de una en una.