Mujeres matemáticas: los problemas más allá de los libros

Esta año Mónica Martínez, estudiante de quinto de secundaria del colegio Saco Oliveros, participó en la IMO 2018 (Olimpiada Internacional de Matemática) y obtuvo la medalla de bronce y un reconocimiento por ser la mejor representante del continente americano.

Más allá de su destacada participación, llama la atención que fue la primera peruana en acudir a esta competencia tras 11 años sin presencia femenina. “Creo que soy la única chica en el equipo ya que muy pocas chicas fueron al proceso selectivo. Quizás sería bueno que se promueva un poco la participación de las mujeres en estas olimpiadas”, ha dicho Mónica sobre el tema.

Por su parte, Fidel Jiménez, miembro de la Comisión de Olimpiadas de la Sociedad Matemática Peruana que viajó este año con los participantes como jefe de la delegación peruana, comprobó que la baja participación femenina no es exclusiva de nuestro país.

“Más de la mitad de países participantes no contaban con una integrante mujer en su delegación y las delegaciones de los tres primeros países, EEUU, Rusia y China, fueron conformadas solo por estudiantes varones”.

EGMO: una oportunidad para mujeres

Para fomentar el número de chicas en la IMO y otras competencias internacionales, desde el 2012 se celebra la EGMO (Olimpiada Europea Femenina de Matemática).

Estas olimpiadas son solo para mujeres y nacieron con el propósito de promover la participación femenina. Mónica cree que son una gran oportunidad para las estudiantes y que “si es que hay más olimpiadas de este tipo muchas mujeres se animarían a participar”.

En su reciente viaje a la IMO Fidel Jiménez pudo contrastar experiencias con otros jefes de delegación y varios le comentaron que “la participación de sus países en la EGMO ha contribuido significativamente a incentivar la participación de mujeres en sus olimpiadas nacionales o selectivos locales y, por ende, se ha reflejado en una mayor representación femenina en sus delegaciones internacionales”.

Por este motivo, para Fidel el nacimiento y crecimiento de una olimpiada femenina internacional es algo positivo, en especial una que cuenta con más de 50 países participantes.

“Es bueno tener presente que el haber contado con una alumna (Mónica Martínez) en nuestra delegación para la IMO 2018 es un hecho especial para nuestro país que solo se ha dado esporádicamente a lo largo de los años (Liz Vivas, 1998; Jossy Alva, 2005, 2006, 2007; María Teresa Huánuco, 2006), pero es la visión de la Comisión de Olimpiadas que esto cambie y nos aproximemos cada vez más hacia la razón ideal 1:1 entre mujeres y varones”.

Números que no cuadran

Pero existen también otros problemas en el mundo de las competencias estudiantiles de matemática. Uno de los más preocupantes es el de la falta de recursos.

Por dar solo un ejemplo, en este momento hay siete estudiantes peruanos que han clasificado a la Olimpiada Mundial de Geometría, que se celebrará en Moscú del 28 de julio al 1 de agosto y que aún no cuentan con pasajes ni respaldo económico para poder asistir al certamen.

“Estamos muy preocupados, nos queda poco tiempo y de verdad todos deseamos participar. Nos hemos esforzado mucho para ser seleccionados”, agrega Mónica. Ella espera que dentro de poco le lleguen buenas noticias por parte de las autoridades y le informen que está todo listo para viajar y dejar el nombre de Perú nuevamente en lo alto.

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