Belén Barnechea, hija de Alfredo Barnechea, se casó y lució como una princesa real de cuentos

Belén Barnechea, hija de Alfredo Barnechea, contrajo matrimonio este sábado pasado con Martín Cabello de los Cobos, nieto de los condes de Fuenteblanca, en la ciudad natal de Trujillo. En dónde la bella novia lució un mágico vestido inspirado en la realeza con detalles únicos y originales apegados al romanticismo.

Este matrimonio ha unido a las élites de ambas familias en un increíble evento que inició en las calles luego de haberse convertido en marido y mujer. Después de este bello y tradicional pasacalle se siguió con bailes típicos, fuegos artificiales que iluminaban el cielo de aquella noche, dónde se sellaba un amor con la calidez del departamento del norte.

Belén Barnechea, ante el altar, decidió lucir un delicado y majestuoso vestido de novia en donde más de un detalle saltó a nuestra vista por su corte, escote, velo, bordados, entre otros aplicativos que en seguida trataremos a fondo. Porque cada pieza que formaba parte de este mágico vestido blanco invocando a la realeza de cuentos de hadas se volvía un sueño hecho realidad.

Este vestido de novia con el cual se casó la bella hija de Alfredo Barnechea era blanco en su totalidad, con una peculiar y elegante mangas abullonadas que calzaban perfectamente a una altura por debajo del codo, siendo un ¾ del brazo, que iba en completa armonía con el escote cuadrado permitiendo una amplitud muy sofisticada ante la imagen de la novia. Otro aspecto que sumo un impecable romanticismo fue el bordado que acompañaba la parte última del vestido, siendo unas blancas rosas hechas a mano con total delicadeza y finura, así mismo se llevó este detalle en el velo que partía desde la coronilla de su cabeza hasta el suelo. Sin lugar a duda, un trabajo de arte impreso con dedicación en la imagen de Belén Barnechea.

Vestidos de novia que dejaron huella dentro de la Realeza

Según la Revista Vogue mencionó con gran entusiasmo que estos modelos de vestidos de novia dentro de la realeza quedaron considerados los más recordados y los más elegantes de la historia.

Lady Diana Spencer, 1981

“Quizás el vestido de novia más famoso de nuestros tiempos. El dúo David y Elizabeth Emanuel fueron los encargados de crear el voluminoso vestido en tafetán de Lady Di, con el que se casó con el príncipe Carlos en 1981. Cada centímetro del vestido refleja una década llena de excesos: el vestido lleva bordadas miles de perlas y su cola mide casi ocho metros. Su velo medía casi un metro y medio, y estaba sostenido por una tiara de la familia Spencer”.

Kate Middleton, 2011

“Kate Middleton optó por el elegante diseño de Sarah Burton, directora de la casa de modas Alexander McQueen para ir al altar. La Duquesa de Cambridge sorprendió al mundo con un vestido de novia estructurado, muy femenino con un detalle en el corset inspirado en la época victoriana. El encaje hecho a mano incluía rosas, cardos, narcisos y tréboles, y la tiara Cartier Halo que la reina le proporcionó”.

Meghan Markle, 2018

“Se trataba de un modelo creado por Clare Waight Keller, en ese entonces director creativo de la casa Givenchy. El vestido de la Duquesa de Sussex era minimalista, muy blanco y con mangas tres cuartos y  con el cuello estilo ‘bateau’ abierto a lo largo. Su color prístino casi brillaba al recibir los rayos del sol”.

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