Además de amarlo cuando lo comemos, lo querrás aún más cuando sepas que puedes hacer unas mascarillas con él y lucir una piel radiante.
Sí, aunque no lo creas, el chocolate es uno de los ingredientes que mejor favorece a la apariencia de nuestra piel, por lo que es el aliado perfecto para muchos productos de belleza y sobre todo para las mascarillas.
Por ello si lo que quieres lograr es tener un rostro reluciente, brillante e hidratado, nosotras te mostramos algunas mascarillas que puedes añadir a tu rutina de belleza.
Para quienes desean tener la piel como recién salida del spa, pues esta mascarilla es la ideal para nutrirla e hidratarla.
Necesitas:
- 1 cucharada de cacao en polvo
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharada de yogurt natural
Así la prepararás:
Es sencillo, en un recipiente lo que debes hacer es mezclar por completo todos los ingredientes hasta tener un resultado homogéneo. Luego, aplica en tu rostro y déjalo actuar por 20 minutos, para retirarlo, hazlo con agua tibia. El resultado es inmediato, pues tendrás tu piel suave y luminosa.
Para tener un rostro suave y exfoliado, no dudes en probar esta receta de mascarilla.
Necesitas:
- 1/4 de taza de cacao en polvo
- 4 cucharaditas de avena en polvo o también harina de avena
- 1/2 taza de miel
- 4 cucharadas de crema (sin olor)
Sigue estos pasos:
Primero mezcla los ingredientes secos, es decir el cacao con la avena. Luego, removiendo constantemente ve agregando poco a poco la crema y la miel. Combina por completo hasta que logres tener una pasta homogénea y aplícala en tu rostro. Déjala actuar por al menos 20 minutos. Un dato extra es que, si te sobró mascarilla, puedes usarla en cualquier otra parte del cuerpo.Termina enjuagando con agua tibia.
Para mejorar el aspecto de tu rostro e hidratarlo de manera sencilla, esta receta se convertirá en tu aliada.
Usarás:
- 1 barra de chocolate negro sin azúcar
- Aceite de almendras o aceite de oliva
Hazlo así:
Comienza por derretir el chocolate con el aceite, cuando veas que esté completamente derretido mézclalo y quítalo del fuego. Deja enfriar el resultado para que te lo puedas aplicar. Déjalo por 20 minutos y quita con agua tibia.