Sin querer queriendo, muchas veces los perros dan lecciones de vida a los propios humanos. En esta ocasión, dos canes acompañaron el cadáver de un hombre de 68 años, que perdió la vida el pasado domingo 31 de octubre, luego de esperar seis horas una ambulancia. Todo sucedió en el estado brasileño de Sao Paulo.
Un vecino pidió ayuda para que el adulto mayor reciba atención médica, pero la solicitud fue negada. La persona que falleció se llama Damiao y estuvo en el piso de un bar.
En ese momento, sus mascotas no se separaron del cuerpo del hombre e impidieron que alguien se acerque al dueño. Por el lugar apareció una mujer, quien también pidió ayuda y reveló que un agente del servicio de salud le comentó que “nadie muere por dolor”.
La brasileña se mostró indignada por la respuesta. “Un desprecio total. Incluso, más tarde llegó la Policía y preguntó por qué no ayudamos, pero yo no conduzco, no pudimos llevarlo, tenía que haber venido la ambulancia. Solo llegó después de su muerte. Y cuando llamamos, antes de que muriera, el asistente todavía decía que nadie moría de dolor”, indicó.
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Los policías llegaron al bar y encontraron el cadáver, cubierto por una manta y rodeado por las fieles mascotas. Los canes fueron los únicos que lo acompañaron hasta el último minuto de su vida.
Sin duda alguna, el gesto de los perritos generó mucha ternura, ya que se comprobó una vez más que son los mejores amigos del hombre. Ellos jamás negociaron el abandono y no dudaron dos veces para hacer compañía.