Jon Gopsill fue entrevistado por la BBC a principios de semana luego de publicar una serie de fotos en su Facebook tras el hallazgo de sus dos perros mientras daban un paseo por la playa.
Los canes del hombre disfrutaban de un día soleado hasta que se toparon con algo extraño que llamó mucho la atención. A simple vista parecía un pedazo de basura, pero cuando el mar golpeó contra el objeto se dieron cuenta que se trataba de un fósil antiguo.
Gopsill, quien también es un paleontólogo aficionado, narró su caminata junto a Poppy y Sam, cuando se pronto sus mascotas empezaron a olfatear el anticuado esqueleto de 5’5" de un ictiosaurio.
"Me puso la piel de gallina cuando lo vi, me alejé y regresé y seguí sacudiendo la cabeza con incredulidad”, dijo el padre adoptivo de los cachorros.
“Tenía unos 5 pies y 5 pulgadas (167 cm) de largo y se veía tan fresco. No podía creerlo, fue increíble”, agregó Jon, quien de inmediato se puso en contacto South West Heritage Trust para llevarse el fósil y poder estudiarlo.
Los científicos indicaron que el ictiosaurio pertenecería a una nueva especie, pero sin cabeza en difícil de estar seguro. Asimismo, agradecieron el accionar de Gopsill por compartir el descubrimiento de sus mascotas en Facebook.