Muchas organizaciones y activistas se movilizaron para hacer del maltrato animal y los derechos de los animales un tema de importancia y de lucha para lograr que la matanza de perros muy común en Corea disminuya.
Con la actividad para promover esta visión de cuidado y respeto de la vida animal, muchos mercados en el país fuero cerrando.
Uno de los más grandes de Corea del Sur, conocido como Grupo, cerrará en un mes gracias a las autoridades locales.
Pero, éste no sería el único en cerrar, ya que el año pasado en Seongnam se clausuró uno de los más grandes mataderos del país, llamado Taepyeong.
Las clausuras han permitido un progreso en el país asiático en torno a nuevas leyes que eviten el maltrato animal.
Además de la matanza animal también el consumo de carne de mascotas se ha reducido gracias a que los más jóvenes ven esta práctica como un tabú.
Por otro lado, el comportamiento social de los jóvenes es más de buscar estos animales como una compañía que ha hecho que la práctica de consumir su carne sea totalmente ajena a su actual estilo de vida.
Nara Kim, miembro representante de la Humane Society International, dijo a Daily Mail que la Humane Society permanece trabajando con los mataderos para cerrarlos desde adentro.
“Durante casi cuatro años hemos estado ayudándolos a cerrar sus negocios y eso es una señal de que estamos viviendo tiempos más compasivos.
Los mataderos y la venta de carne de perro son cada vez menos populares, y esperamos que eso inspire a que más lugares cierren y no deban segur sufriendo”, expresó.
El plato típico que incluye carne de perro en Corea del Sur es Bosintang.
Los métodos de sacrificio son electrocución y ahorcamiento.
Existe un limbo legal que pese a tener una ley de protección animal, en Corea del Sur se viola el reglamento habitualmente.
Hay un porcentaje de 70% de surcoreanos que dice no comería carne de perro en el futuro, reveló una encuesta de Gallup Corea.