John Rucker de Iowa, Estados Unidos decidió que con la ayuda de sus perros entrenados podría rescatar a una especie de tortugas en peligro de extinción.
Trabajo en equipo
La principal ayuda de los perros está en colaborar con la recolección de las tortugas para así poder contar la cantidad de estos reptiles en el estado.
Esto permitiría a los conservacionistas a mantener un registro que ayudaría a tener una mejor distribución del terreno a largo plazo.
Los perros entrenados de esta forma se avocan a la búsqueda y cuando las encuentran, las toman en su boca y se las llevan a Rucker para que haga el conteo.
Luego de este trabajo, las tortugas son identificadas por los expertos y son analizadas para futuras investigaciones.
Las tortugas Ornat son una especie en peligro de extinción y se trata de unas pequeñas tortugas con unas manchas amarillas en su caparazón.
En la actualidad esta especie es considerada bajo amenaza, por lo que este trabajo de contabilidad e investigación es fundamental para que se logre hacer algo al respecto.
“Uno sabe cuando encontraron una porque se emocionan y mueven su cola de lado a lado furiosamente”, comenta Rucker.
Lo que se considera la mayor amenaza para esta especie es en resumidas cuentas la acción del hombre. Por ejemplo:
- Degradación de su hábitat
- Presencia de depredadores
- La caza furtiva
- El cambio climático
Es así como la ayuda de los canes resulta idónea en favor del rescate de otra especie animal que por causa del descuido humano las ha puesto al borde de la desaparición.