Todos sabemos que una buena alimentación y rutina de ejercicios garantizan el buen desempeño de nuestro organismo. En ese sentido, consumir frutas variadas, verduras frescas y una dieta rica en antioxidantes, puede mejorar la calidad de nuestra piel aunque esto no signifique que las arrugas o la celulitis vayan a aparecer. "No podemos esperar obtener resultados milagrosos exclusivamente mediante la dieta o la suplementación", explica el nutricionista el nutricionista de Medicadiet, Álvaro Sánchez.
Según narra el especialista, existen ciertos alimentos -que seguramente has de tener a mano-, "cuyos ingredientes pueden generar estrés en el organismo, el cual a su vez genera radicales libres, que son los responsables del envejecimiento prematuro". Estos radicales libres se producen tras una mala práctica de ejercicios excesiva, consumo de tabaco o alcohol.
Lo recomendable es guiarse por el Plato de Harvard, recomendada por la Harvard T.H. Chan School of Public Health donde se sugiere -a groso modo- una tabla de alimentación que incluya por lo menos un 50% de frutas, verduras y hortalizas diariamente, un 25% de cereales integrales y un 25% de proteína de buena calidad donde se le de prioridad al consumo de pescados, legumbres y carnes de ave y eliminando carnes procesadas.
Siguiendo las sugerencias mencionadas y además, dejando de lado los alimentos que a continuación enlistaremos, podremos contribuir a frenar el envejecimiento celular causado por la acción de los radicales libres.
Al igual que las patas, el pan blanco "pueden inducir a una inflamación de los tejidos que da lugar al envejecimiento", explica Hernando. Además señaló que "cuando vayamos a comprar pan o cualquier otro cereal es recomendable escoger siempre la versión integral lo más natural posible. Esta máxima se debe aplicar también a los cereales de desayuno, mejores cuanto menos refinados y más naturales. Por tanto, es recomendable evitar todos aquellos procesados que vienen en caja y optar por otros como los copos de avena, de los que aprovecharemos la fibra y todos sus nutrientes".
"La margarina contiene grasas trans, mientras que la mantequilla es una fuente de grasas saturadas. Lo ideal es evitar ambas y potenciar el consumo de grasas insaturadas, como las que encontramos en el aceite de oliva", señaló Hernando. La especialista explicó que no sólo debemos restringir la mantequilla o margarina si no todo alimento que en su elaboración contenga las mismas.
Una de las bebidas preferidas por miles de peruanos, sin embargo, Hernando explica que "los excitantes presentes en el café o el té aumentan el cortisol, una hormona conocida como la hormona del estrés".
"El cortisol es necesario, ya que nos mantiene activos, pero un exceso de esta hormona provoca estrés crónico, cosa que aumenta la presencia de radicales libres en sangre y, por tanto, la aceleración del envejecimiento". En ese sentido, Hernando agrega que la cafeína "es deshidratante, cosa que se puede notar en la piel de las personas que la consumen en exceso".
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"Durante mucho tiempo se ha extendido la creencia de que el alcohol es beneficioso para la salud porque es una fuente de antioxidantes, pero no se menciona la cantidad de efectos nocivos que tiene y su relación con numerosas enfermedades", explica Sánchez.
En ese sentido, "el alcohol, así como muchos procesados que consumimos habitualmente, destroza las paredes celulares y potencia la inflamación interna de los tejidos, que puede degenerar en el envejecimiento prematuro", indica Hernando.
"Es importante tener en cuenta que el azúcar presente de forma natural en las frutas no actúa de la misma manera que el azúcar refinado que encontramos en la miel", explica la nutricionista, quien recomienda restringir el consumo de licuados, procesador y NATURALES. "Al tomar zumo, lo que estamos haciendo es retirar la fibra de la fruta, que es la responsable de que nuestro cuerpo pueda absorber en azúcar lentamente, de manera que se generan picos de glucosa en sangre que también provocan estrés celular", concluye la nutricionista.