Dentro de la vasta despensa que nos brinda la Amazonía peruana destaca la pitahaya, un fruto considerado un prodigioso superalimento gracias a sus importantes propiedades nutricionales que favorecen el buen funcionamiento del organismo y fortalecen el sistema inmune frente a diversas enfermedades.
La pitahaya es una fruta que puede tener color amarillo o rosado, tiene forma ovalada y su cáscara presenta protuberancias con puntas de color verde y amarillo, por lo que se le conoce también como la “fruta del dragón”.
Su pulpa es blanquecina con muchas semillas de color negro. Su tamaño va desde los 8 hasta los 12 centímetros de largo y su peso varía de 150 a 450 gramos.
Se trata de un fruto que tiene muy bajo aporte calórico, por su baja concentración de carbohidratos, pero tiene un alto contenido de vitamina C, ideal para prevenir enfermedades respiratorias como la gripe y los resfriados, además de mejorar la absorción del hierro de los alimentos por lo que ayuda a combatir la anemia.
Contiene minerales como el calcio, hierro y fósforo. Asimismo, es una gran fuente de antioxidantes y vitaminas del complejo B como la Tiamina (B1), Riboflavina (B2) y Niacina (B3), que son vitales para la producción de glóbulos rojos.
El consumo regular de la pitahaya reduce la proliferación de radicales libres en nuestro organismo, que son los responsables de la aparición de tumores cancerígenos y otras enfermedades graves.
Además, estos nutrientes son muy importantes en el periodo de crecimiento, embarazo, lactancia materna, actividad física intensa y para sobrellevar tratamientos oncológicos.
Otra importante propiedad de la pitahaya es que protege al hígado impidiendo que lo dañen diversos tipos de toxinas. Asimismo, sus semillas son ricas en Omega 3, ideal para combatir algunas enfermedades autoinmunes y prevenir la aparición de ciertos tipos de cáncer relacionados con los cambios hormonales, como el de mama, colon y próstata.
La pitahaya se consume al natural, en jugos, cócteles y se emplea en decoraciones gastronómicas por su gran atractivo visual. Por su gran versatilidad se utiliza como insumo de helados, yogur, mermeladas, postres, gelatinas y refrescos.
Las hojas de la pitahaya también cuentan con nutrientes importantes para nuestra salud y al consumirlas en infusión ayuda a combatir la migraña y el insomnio.
Por todo lo mencionado, esta prodigiosa fruta amazónica tiene un alto potencial para su aprovechamiento en la industria alimentaria (pulpa congelada, jugos, jarabes, licores y salsas), así como colorante natural. También se puede aprovechar las flores y tallo en la industria cosmética (esencias aromáticas, jabones, champú) y farmacológica (medicamentos), así como forraje para alimento balanceado animal.
La pitahaya crece en departamentos de la selva como Amazonas y San Martín, aunque se ha introducido su cultivo en otras regiones del país como Piura, Lambayeque y Junín (provincia de Chanchamayo).
Actualmente, la producción se destina básicamente al mercado nacional, pero encuentra potenciales mercados en países europeos como Francia y Holanda, así también en el mercado asiático y en Estados Unidos.
Fuente: ANDINA