Pide tus deseos con glamour. Existen diferentes historias sobre las tradicionales doce uvas a la media noche, sin embargo, con el pasar de los años se han ido cambiando las maneras de servirlas a la mesa.
Si bien el pavo, cuy o lechón son los protagonistas en la cena de Navidad, las doce uvas tienen ganada la corona en Nochevieja, por lo que nosotras te enseñaremos 10 maneras de presentarlas a la mesa con estilo. Mira nuestra fotogalería y lee las recetas de algunas más elaboradas. Atenta y toma nota.
Retira el tallo y lava bien las uvas, luego, ponlas al congelador durante 3 horas. Preséntalas sobre pirotines metálicos con montadientes.
4 porciones
480 g (1 lb) de uvas blancas
90 g (3 oz) de nueces peladas
2 cdas de mermelada de naranja
30 g (1 oz) de mantequilla
1 cda de coñac
2 claras de huevo
90 g (3 oz) de azúcar
1. Lava y escurre las uvas blancas. Pon la mantequilla a derretir en una sartén antiadherente, agrega las uvas y la mermelada, y cocina todo a fuego alto durante 5 minutos.
2. Baña la mezcla anterior con el coñac y déjalo evaporar. Agrega las nueces machacadas y después retira la sartén del fuego.
3. Bate las claras con el azúcar a punto de merengue. Distribuye las uvas entre cuatro moldecitos y procede de igual manera con el merengue. Hornéalos 6 minutos en la parte media del horno precalentado a 200º C (400º F), hasta que el merengue se dore. Deja refrescar el postre y sírvelo.
20 minutos
Utiliza diferentes tamaños de copas como recipientes de las uvas y tendrás una composición maravillosa.
Utiliza los centros navideños para atraer toda la atención a esta cábala de deseos.
¡Deliciosas! Baña cada una de las uvas en clara de huevo. A continuación, se rociarán con azúcar evitando que se formen terrones. Deja secar y listo.
Aprovecha el contorno de una pera y coloca con la ayuda de montadientes las doce uvas.
Introduce la docena de uvas en palitos de montadientes y decora con chocolate. ¡Ideal para tus engreídos!
Exclusivo para adultos, coloca en un palito de brocheta las doce uvas y añade champange.
Consiste en hacer una cama de caramelo para cada uva. De esta forma, evitaremos que se muevan en el plato. A cada uva, se le pondrá un montadientes para que nadie se ensucie las manos.
Decora un portahuevos y sirve un ecoamigable recipiente de uvas.