Incorpora este alimento en tus desayunos y disfruta de sus grandes beneficios, no necesitas ser una experta en la cocina para preparar esta receta, te enseñamos cómo.
La zanahoria es un alimento que al igual que las espinacas, los tomates y las hortalizas contiene carotenoides, la cual, según la OMS, en su informe World Cancer Report 2014, ayuda a prevenir algunos tipos de cáncer como el de mama.
Asimismo, aporta vitaminas a nuestro cuerpo como (A, B, C y E), minerales y compuestos antioxidantes. Debido a ello, a continuación te mencionamos los grandes beneficios que la zanahoria le aporta a la salud, mencionado en el artículo Medical News Today. ¡Atenta y toma nota!
Las zanahorias contienen betacaroteno, la cual tiene el poder de reducir el riesgo de cáncer de pulmón y de colón, según estudios de la suplementación.
Un estudio de 2011 descubrió que el extracto de jugo de zanahoria tiene el poder de matar o reducir las células de la leucemia e inhibir su progresión.
En las siguientes líneas te vamos a enseñar a preparar una exquisita mermelada de zanahorias. ¡Empecemos!
4 porciones
350 gr de zanahoria
350 gr de azúcar
130 ml de agua + la suficiente para cocer la zanahoria
1 rama de canela
piel y zumo de 1 limón
1/2 cucharadita de nuez moscada
1 pizca de sal
1. Lava y raspa las zanahorias, córtalas y ponlas a cocer en abundante agua hasta que estén blandas. Puedes hacerlas al vapor igualmente siempre dejándolas en óptimas condiciones para triturar.
2. Mientras cocinas las zanahorias, prepara un almíbar. En un cazo pon el azúcar, los 130 ml de agua, el zumo y un trozo como de un dedo de largo de la piel de limón y la rama de canela. Una vez comience a hervir, deja unos 3 o 4 minutos y retira del fuego. Reserva mientras trituramos la zanahoria.
3. Una vez cocidas las zanahorias, saca del agua, escurre bien y tritura con ayuda de una trituradora o bien con la batidora.
4. Incorpora la zanahoria convertida ya en puré al almíbar (retira la rama de canela y la piel de limón), agrega la nuez moscada y la pizca de sal, mezcla bien y pon al fuego durante unos 10 a 15 minutos, o hasta que reduzca al espesor deseado.
5. Una vez lista y aún bien caliente guárdala en recipientes de vidrio esterilizados, preferentemente en botes con tapa que se suelen autosellar.
(Foto: El Monstruo de las Galletas)