No existe nada mejor que un delicioso ponche de almendras para subir la temperatura y levantarnos los ánimos en este invierno. Es el nuevo imperdible en la mesa peruana ideal para tomarlo en épocas de frío.
Esta tradicional receta tiene una contundente ración de almendras que te harán degustar un sabor inigualable, además, es importante que sepas que estos frutos secos son ricos en proteínas, por otro lado, nos proporcionan energía de calidad y se les considera las grasas saludables que por supuesto, nuestro organismo necesita. ¿Qué opinas? Si aún no estás convencida, te cuento que, además, las almendras poseen calcio, vitamina E y es considerada un gran antioxidante. Hasta aquí, nuestro cuerpo ya está convencido. ¡Anímate!
Quizá no seas una experta cocinando, o consideras que eso no es lo tuyo, pero no te sucede que muchas veces nos apetece cambiar un poco los alimentos que consumimos e incursionar en la gran variada gastronomía peruana. Siempre es importante consumir alimentos variados y qué mejor forma que con esta peculiar receta de ponche de almendras que te dejará encantada. A continuación, nosotras te enseñamos paso paso, fácil y rápido.
Presta atención al elemento peruano y anímate a preparar este ponche energético que te abrigará en este día nublado. Toma nota.
250 gramos de almendras
250 gramos de ajonjolí
3 litros de Agua (3 litros)
4 copas de pisco (peruano)
1 cucharadita de esencia de vainilla
Pizca de canela
Clavo de olor
Azúcar al gusto
Sencillo, para poder preparar este delicioso ponche de almendras, primero pon a hervir el agua junto con la canela y el clavo de olor durante 15 minutos, de esta manera estaremos asegurando el aroma de nuestro ponche. Luego adiciona las almendras semitostadas con el ajonjolí. Finalmente disuelve azúcar en la preparación y cuela la mezcla cuando se enfríe.
Al momento que vamos a servir, recuerda agregar el pisco y la vainilla. Este delicioso ponche se sirve tradicionalmente caliente. Ideal para este invierno.
Recuerda que para darle un estilo aún más Wapa, puedes servirlo en una copa de cristal y apreciar la consistencia de este preparado. Riquísimo.