Frida, una perra labradora que se convirtió en ícono del rescatismo durante los trágicos terremotos de septiembre de 2017 en México, fue retirada este lunes de servicio y condecorada por su labor.
"En el marco de la ceremonia se efectuó el retiro del equipo táctico al elemento canino Frida y la entrega de un juguete simbolizando con ello el comienzo de su nueva vida", indicó la Secretaría de Marina (Semar) en un boletín.
Luego de nueve años de servicio, Frida deja sus botas de neopreno, las que utilizó para rescatar 12 vidas y encontrar más de 40 cuerpos a lo largo de una larga carrera como "rescatista".
Se desempeñó en las labores de búsqueda y rescate de personas dentro de la Unidad Canina y la de Búsqueda y Rescate Urbano de la Secretaría de Marina.
La peludita fue condecorada por la Armada Mexicana durante una ceremonia este lunes.
"Sus ladridos siempre fueron causa de esperanza, y en momentos de dolor e incertidumbre, Frida nos aliviaba", comentó el subsecretario de Marina, el almirante Eduardo Redondo.
Con botas de neopreno y máscara protectora, las imágenes de Frida buscando entre los escombros de una escuela dieron la vuelta al mundo y se convirtieron en símbolo de esperanza de un país que perdió más de 300 vidas en el desastre.
Los mexicanos la homenajearon, entonces, pintando un mural con el dibujo del animal hembra en un edificio.
Ahora, con 10 años, dejó de usar su indumentaria de rescate y recibió un juguete para morder y jugar en esta nueva etapa de su vida.
"Frida, misión cumplida con honores", así la homenajeó Redondo.
Cabe resaltar que, los planes de retirada aún están por confirmarse, pero se cree que será trasladada al campo, fuera del ruido de la ciudad para ayudar a entrenar a una nueva generación de perros de búsqueda y rescate.