Los electrodomésticos consumen energía y se ve reflejada en nuestro recibo de luz, pero existe uno cuya facturación es mucho mayor.
Únete al canal de Whatsapp de WapaLa cantidad de energía que una vivienda consume está estrechamente relacionada con la forma en que usamos nuestros electrodomésticos, y uno de los principales contribuyentes al aumento de la factura de electricidad es la nevera. Sin embargo, es viable tomar el control de este consumo con pequeños cambios que tendrán un impacto positivo en tus finanzas mensuales.
La implementación de estos consejos prácticos permitirá un ahorro considerable en tu factura de electricidad, al mismo tiempo que contribuirás a la preservación del medio ambiente, ya que reducirás la emisión de gases de efecto invernadero vinculados al consumo de energía. A continuación, te ofrecemos una serie de medidas sencillas pero eficaces para reducir el consumo de energía de tu refrigeradora.
Para calcular la cantidad de kilowatts consumidos por una refrigeradora, se requiere revisar mensualmente la potencia en kilowatts (kw) o watts (w) del aparato y dividirla por 1,000. Luego, se debe considerar la cantidad de horas que se usa diariamente durante el mes. Finalmente, se multiplica por la tarifa eléctrica proporcionada por la empresa de servicios públicos.
Supongamos que la refrigeradora consume 700 watts al día, funcionando aproximadamente 1 hora. El costo mensual sería: 700/1,000 (conversión a kilowatts) x 1 (horas de uso por día) x 30 (días al mes) x 0.66 (tarifa) = 13.86 soles. Sin embargo, es importante destacar que este cálculo es un ejemplo y los costos pueden variar.
La cantidad de energía que consume una refrigeradora depende de factores como su tamaño, eficiencia y la cantidad de uso. Las unidades más grandes generalmente consumen más energía, con algunas excepciones, debido al mayor volumen de aire y alimentos que deben mantenerse fríos. Además, el consumo de una refrigeradora pequeña puede variar significativamente según su tamaño, que puede oscilar entre 300 y 1200 litros, lo que influye en la cantidad de energía que consume.
Tener cuidado con la TEMPERATURA: Una estrategia esencial para reducir el consumo de energía es la correcta configuración de la temperatura en tu congelador. Según los expertos, un error común es mantenerlo a una temperatura excesivamente baja. Por cada grado que reduzcas, el consumo de energía aumentará en un rango del 5 al 8%. Por lo tanto, se recomienda ajustar la temperatura alrededor de -18 grados, lo que podría resultar en un ahorro significativo. Además, mantener la temperatura del frigorífico en un rango de 4 a 6 grados también contribuirá a la disminución del consumo energético.
Mantener la REFRIGERADORA EN ESTADO ÓPTIMO es esencial. Evitar la acumulación de hielo es crucial para el funcionamiento adecuado del congelador y, en consecuencia, para ahorrar energía. Los expertos recomiendan eliminar el hielo acumulado cada 6 o 12 meses, lo que garantizará un rendimiento óptimo del dispositivo y un uso más eficiente de la energía.
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La UBICACIÓN ESTRATÉGICA de la refrigeradora en tu hogar también influye en su consumo energético. Si la colocas cerca de electrodomésticos que generan calor, la refrigeradora tendrá que trabajar más duro para mantener la temperatura adecuada. Por esta razón, no se recomienda situarla junto al horno o la cocina. Al evitar esta proximidad, no solo mejorarás la eficiencia energética, sino que también prolongarás la vida útil del electrodoméstico.