La Fiscalía investiga al capitán del buque Mare Doricum involucrado por el derrame de petróleo del pasado 15 de enero en las costas peruanas. Como se recuerda, la embarcación mencionada descargaba miles de barriles en las instalaciones de la refinería La Pampilla, propiedad de Repsol.
Según un documento oficial obtenido por El País, el fiscal Ariel Tapia, de la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales de Lima Noroeste, decidió incluir en la investigación al capitán Giacomo Pisani, de nacionalidad italiana, por la presunta comisión de un delito de “contaminación ambiental dolosa”.
La decisión se tomó a partir de las declaraciones recabadas, la documentación correspondiente y la hipótesis de una posible rotura o fragmentación del llamado "plem", lo cual refiere a las siglas de pipeline end manifold o colector de final de tubería. El fiscal Tapia también llamó a declarar a la tripulación que estuvo involucrada en las maniobras de amarre y en la reposición del barco.
Asimismo, ordenó recopilar las imágenes de video “que registren el puente de mando del buque sobre las actividades de cubierta”. Parte de la hipótesis señala que el derrame de petróleo pudo haberse producido por “por impacto o tirón del tren de mangueras desde el buque”.
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La incorporación del capitán del buque se dio poco después de las acciones legales iniciadas por la empresa española contra el armador del buque. Esta demanda multimillonaria fue establecida contra la naviera tras culparlos de un movimiento anómalo que provocó la rotura de la instalación.
Dentro de la investigación judicial también están incluidos Jaime Fernández-Cuesta, cinco mandos de la refinería y varios funcionarios públicos. Además, incluyeron a la Dirección General de Capitanías y Guardacostas de la Marina, Osinergmin y la autoridad ambiental (OEFA) por omisión de labor de fiscalización administrativa.
Asimismo, el buque en cuestión se encuentra inmovilizado en el puerto del Callao y un juzgado ordenó su incautación tras el pedido del fiscal Tapia. Todo ello responde al derrame de 11.900 barriles de petróleo afecta a 116 kilómetros cuadrados de aguas y litoral, incluidas dos áreas naturales.
Cabe resaltar que, la información brindada por el Ministerio del Ambiente sobre el crudo en el mar sobrepasa la cifra anunciada por Repsol, empresa que reducía la cifra a 10.396 barriles.
Tres oficiales de la Marina acudieron al Congreso de la República para responder sobre el derrame de petróleo generado por la empresa Repsol. Durante sesión de la comisión investigadora señalaron que el peritaje del plem será realizado en el extranjero y que tardará dos meses en concluir.
No obstante, una dependencia de la Marina debe entregar el próximo 15 de marzo una investigación sumaria administrativa sobre lo sucedido en el litoral peruano. Los oficiales mencionaron que en la entrega no podrán sumarle el resultado de la pericia por la fecha de publicación.
Con respecto a las preguntas realizadas por los congresistas, uno de los oficiales de la Marina declaró que a la hora del derrame del crudo no se presentó ningún oleaje anómalo como lo indicaba Repsol.
Como se recuerda, en las primeras versiones del accidente, la empresa española argumentó movimientos en las aguas peruanas ante las alertas de tsunami emitidas por las autoridades marítimas de Chile, al sur de Perú.
La Marina de Guerra no hizo un anuncio similar, pero comunicó a la población la presencia de un "oleaje anómalo" producto de la erupción del volcán en Tonga. Asimismo, las autoridades sí atribuyeron la muerte de dos mujeres en la playa a la fuerza de las olas.
En la misma fecha, numerosas localidades y negocios se vieron afectados por el paso de las aguas. Es por ello que el Instituto de Defensa Civil brindó recomendaciones de prudencia “ante la ocurrencia de oleajes anómalos” en el litoral.
El oficial de la Marina agregó a su respuesta que la rotura de la tubería en el plem de descargase produjo por un esfuerzo anormal producido por una fuerza generada físicamente por el buque. A ello le sumó las condiciones de fatiga del material previo al derrame.
“No hay duda de que hubo un esfuerzo anormal entre el buque, la manga de conexión y la tubería de alimentación, lo cual provocó el accidente", enfatizó.