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La FAMILIA VENEZOLANA que llegó al Perú sin NADA DE DINERO y ahora TRIUNFA CON exitosa empresa de viajes

La historia de lucha de una familia venezolana que llegó a Perú con una mano adelante y otra atrás, hoy gozan de una exitosa empresa de viajes.

La FAMILIA VENEZOLANA que llegó al Perú sin NADA DE DINERO y ahora TRIUNFA CON exitosa empresa de viajes
La agencia lleva operando hace 3 años en el distrito de Miraflores.

El rubro de agencias de viajes es muy competitivo, por ello, lograr sobresalir es todo un trabajo. Ese es el caso de la agencia Alpaca Travel Tours, que ha sabido destacar entre muchas que existen en nuestro país. La empresa está ubicada en el conocido distrito de Miraflores y ha ganado una gran comunidad a través de su cuenta de TikTok, donde suma más de 30 mil seguidores. Si bien el camino no ha sido de flores, la diosa fortuna les ha empezado a sonreír.

Tuvo que pasar seis años desde que la familia Blanco, agotados de la fuerte crisis que aqueja en su país, Venezuela, decidieron migrar desde su natal Maturín hacia Lima, Perú, donde ya los esperaban familiares.

Durante 13 días, subieron a buses para llegar y pasar caminando las fronteras. "Recuerdo que tuve que vender unas zapatillas originales y una laptop para completar los pasajes de bus", recordó con tristeza Kemel Blanco. Luego de llegar a Tumbes, todavía les hacía un largo tramo para llegar a la capital.

¿Cómo fue su travesía de Venezuela a Perú?

Kemel Blanco contó que en el 2018, antes de la llegada de la pandemia, decidió irse de Venezuela con su familia y algunos vecinos también se le unieron en el camino. "El pasaje (de bus) nos cobraron el doble porque se aprovechaban de la situación migratoria", reveló en una entrevista con La República.

Durante el viaje de 13 días por los países de Colombia y Ecuador, él su familia tuvieron que vender sus pertenencias, hablamos de secador, plancha, zapatillas originales, hasta una laptop. Todo con el objetivo de llegar a la suma necesaria para adquirir los pasajes y llegar al norte de Perú.

"Tumbes fue increíble. Ahí conocimos a un taxista que nos ayudó con insumos, comida, gaseosa, galletas. Incluso nos llevó hasta su casa para que hiciéramos arepas para cocinar", narró con melancolía Kemel. Contó que estuvieron dos días en el norte hasta lograr sumar el dinero necesario para comprar los pasajes a Lima.

Ante la adversidad, una idea de emprendimiento surgió

Kemel llegó a Lima con 21 años y tenía el sueño de convertirse en doctor, ya que en Venezuela cursaba la carrera de medicina, el destino lo llevó a conocer todo tipo de oficios. "Trabajé en restaurante, panadería, chicharronería, y luego en un trabajo que se dedicaba al sector de turismo", contó Kemel.

Fue el último trabajo que tuvo, lo que lo llevó a aprender más sobre el tema de turismo en nuestro país. "Fui aprendiendo los planes receptivos, los planes internacionales, lo que se le ofrece a un cliente, lo que no se le podía ofrecer".

Luego de una breve visita a su país, le comunicaron que ya no seguiría trabajando. Esta noticia, lo dejó frío, no obstante, el apoyo de sus compañeros (venezolanos y peruanos) hizo que una ‘mala’ noticia se convierta en una oportunidad para emprender con su propia agencia de viaje.

"Tenía los conocimientos, pero no el dinero. Aparte, esa empresa no me liquidó. Tenía dos años y medio con ellos y no me liquidaron porque no estaba en planilla, a pesar de que me dijeron que sí", explicó.

Con una computadora de uso escolar por sus sobrinas y una impresora, nació su agencia Alpaca Travel Tours, la cual funcionaba desde su casa y mediante las redes sociales.

"El primer pasaje que vendí fue para España y fue a una amiga de un amigo. Había adquirido un Izipay para facilitar los pagos con tarjeta de crédito, e incluso adquirí un vinil y flores (para la entrega del pasaje)", recordó Kemel.

Fue un trabajo de hormiga, pero esa primera clienta fue el inicio de todo, ya que lo recomendó a otros familiares y conocidos. Asimismo, el continuo uso de las redes sociales ayudó que llegarán más clientes que no dudan en compartir sus experiencias para recomendarlos.

De esta manera, con mucho esfuerzo y dedicación, la familia Blanco pasó de llegar sin un sol a tener unas de las agencias líderes del sector turismo no solo nacional, sino también internacional. El joven usa sus redes sociales, TikTok, Instagram y Facebook para llegar a más clientes haciendo ofertas, realizar concursos y rifas. Por último, Kemel compartió un consejo para todos los que quieren emprender, pero tienen miedo a lanzarse a la piscina: "Trabajen en lo que puedan, pero tampoco estén trabajando toda la vida para alguien. Si tú tienes un talento, desarróllalo más. Por ejemplo, si tú sabes cocinar, aprende lo que puedes en una cocina, en un restaurante, y después abre un negocio".

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