Esta sería la forma correcta de consumir carbohidratos si deseas perder peso
Únete al canal de Whatsapp de WapaSegún un estudio nutricional sobre los carbohidratos, que fue publicado por la revista científica The Lancet, concluyó que se pueden comer con moderación, pero sin eliminarlos completamente de nuestra dieta para lograr bajar de peso. Esta investigación se desarrolló durante más de 25 años en cuatro ciudades de Estados Unidos.
Los expertos evaluaron a más 15 mil adultos con una edad promedio de entre 45 y 65 años para conocer su esperanza de vida. Se estudió principalmente si existía algún tipo de conexión entre el aporte calórico de los carbohidratos y diversas causas de mortalidad, y si sustituir estos nutrientes por grasas y proteínas hace un cambio en dichos motivos. Claro, el estudio tomó en cuenta si los lípidos y aportes proteicos procedían de fuentes animales o vegetales.
Los resultados demostraron que una dieta ideal para perder peso y mantenernos saludables debe contener entre un 50 y 55% de hidratos de carbono. El consumir un porcentaje inferior al 40% o superior al 70% puede provocar un riesgo para la salud.
Pero las cantidades no fueron lo más importante de la investigación, así como manifestó Miguel Ángel Martínez González, catedrático de Salud Pública de la Universidad de Navarra. "El mensaje más importante es que todo depende de con qué se comparen los carbohidratos, no si son buenos o malos", aseguró. El nutricionista indicó que está investigación es una respuesta apropiada a los últimos estudios hechos sobre los carbohidratos.
En la actualidad, son muchos los nutricionistas que basan sus dietas en la reducción de la cantidad de hidratos en la medida posible. Martínez González habló específicamente de un estudio hecho en el 2017, llamado PURE y que provocó mucha polémica tras su publicación. "Se centraba en las cantidades, lo cual es fatal. Produjo mucho desconcierto, y yo mismo les llevé la contraria [a los autores], porque no tiene en cuenta las sustituciones".
El sistema de esta investigación, que no es tan complicada como la de PURE, sí habla de un reemplazo nutricional. Es decir, la mortalidad de los participantes disminuía cuando los carbohidratos eran reemplazados por proteínas y grasas vegetales, y se incrementaba cuando se trataba de una dieta basada en carnes.
Conocidas guías de alimentación de la Escuela de Salud Pública de Harvard y el triángulo invertido del Instituto Flamenco de la Salud han empezado a cambiar la visión colectiva sobre los carbohidratos. Es más, ya no recomiendan la reducción radical o mantenerlos como base alimenticia, al estilo de la apretada pirámide de la alimentación. Los incluyen simplemente como un aporte equilibrado dentro de una dieta normal.
Pero con el estilo de vida que llevamos en el siglo XXI ha generado que estos nutrientes reduzcan su importancia en las dietas en el mundo. En países como la India o China, cuyo aporte era fundamental en la antigüedad se han convertido en un problema de salud pública. Por ejemplo, el arroz contiene hidratos refinados, de muy mala calidad.
Para Martínez, no es necesario eliminar los carbohidratos de nuestras dietas. La otra cara de la moneda la da Japón, que tiene una dieta basada en arroz pero al combinarlo con pescado y verduras, sin meter mucha carne, consigue un balance nutricional que ayuda a mantener un peso saludable.
En conclusión, la investigación reveló que los participantes que modificaron su dieta ganaron un promedio de unos cuatro años de esperanza de vida. Mientras, que la mayoría de los participantes que conservaron una dieta de bajo consumo en carbohidratos, es decir, con muchas más proteínas y grasas de origen animal que verduras, frutas o legumbres. Y de hecho, este perfil tuvo mayores tasas de mortalidad que aquellos que sobrepasaban la cifra del 70% de carbohidratos.