¿Quieres comprar un cosmético? Sigue estas recomendaciones para entender las etiquetas

¿Qué es el PAO?, ¿Debe de llevar fecha de caducidad un cosmético?, ¿qué es el "main contain"? o ¿Cuál es el orden en el que aparecen los ingredientes en la etiqueta de los cosméticos? son algunas de las preguntas cuyas respuestas deberíamos conocer antes de adquirir un producto.

Los cosméticos no son un medicamento, aunque pueden llevar prescripción facultativa asociada a una patología, pero conocer sus componentes y saber el efecto que provocan en la piel es esencial para evitar problemas dermatológicos.

Uno de los primeros detalles a tener en cuenta es el "orden" de los ingredientes, según explica Pedro Catalá, doctor en Farmacia, y cosmetólogo fundador de Twelve Beauty.

"Los ingredientes se colocan en orden decreciente de concentración. Los que aparecen primero son los que se encuentran en mayores proporciones y los últimos, los que están presentes en cantidades más pequeñas", aclara.En caso de que la concentración sea inferior al uno por ciento pueden mencionarse sin orden después de los que tengan una concentración superior, pero no por ello debemos ignorarlos.

"No significa que el fabricante haya querido ahorrar en principios activos", ya que según detalla el doctor sustancias funcionales como la alantoína (Allantoin) o la coenzima Q10 (Ubiquinone) son activos que se incorporan a las fórmulas en bajas dosis.

 Lo habitual es que en la lista el primer ingrediente sea el agua “porque en una crema de día o de noche, es normal que el agua represente entre el 65 y el 70 por ciento del contenido total de la fórmula”, indica Catalá, quien reseña que algunas marcas naturales optan por utilizar agua destilada.

"Sobre el papel la idea es buena, pero la realidad es que la mayoría de las aguas destiladas son aguas de lavado", su contenido en materia activa es "poco significativo" y suelen arrastrar un "elevado" grado de impurezas.

Los extractos de plantas se describen con su nombre en latín. El aceite de rosa mosqueta, por ejemplo, figura como "Rosa Canina Fruit Oil" y también la composición debe especificar si se trata de un extracto o un aceite, así como de la parte de la planta de la que se extrae.

Sin embargo, los ingredientes sintéticos aparecen con su nombre químico. Por ejemplo, el aceite de vaselina figura como “Paraffinum liquidum”.

A pesar de ser muy común en los envases, ¿qué significa la expresión "may contein" ("puede contener")? Suele incluirse en los productos cosméticos de maquillaje, dice el farmacéutico, y también en los indicados para las uñas y el cabello.

Se trata de una advertencia y significa que, los minerales que incluidos en ese producto, pueden contener, "fruto del proceso de extracción", otros minerales o metales.

Catalá considera "importante" que la caja, la botella o el tarro incorpore el número de lote de fabricación o la referencia que permita la identificación de la fabricación.

La trazabilidad del producto es importante por si provoca algún tipo de "problema" en la piel una vez en el mercado, así el consumidor puede saber, cuándo se elaboró el producto. Si este dato no fuera posible incluirlo en el envase, la mención puede figurar en el embalaje.

Los cosméticos también tienen fecha de caducidad, pero los que tienen una caducidad superior a los 30 meses no tienen obligación de incluirla.

Aunque si es necesario que aparezca el tiempo de consumo recomendado una vez abierto, lo que se denomina PAO (Period After Opening-período después de la apertura) y figura con el símbolo M seguida del número que indica la garantía de las propiedades "intactas" del producto.

Es habitual que envase incluya también símbolos con recomendaciones sobre cómo reciclar, el tiempo de exposición, si contiene alcohol o materiales inflamables.

Además de logotipos como “Cruelty Free”, en referencia a que no han sido testados en animales o aquellos que determinan que se trata de cosmética vegana, además de los que acreditan con varios certificados que los ingredientes provienen de la agricultura ecológica.

EFE