Cinco cosas que extrañas de los cumpleaños en el colegio
Wapas, la etapa escolar fue la mejor de nuestra vida y nosotras te la recordamos de la mejor manera: con sus fiestas infantiles.
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Wapas, cuando mencionamos la palabra "colegio" en una conversación es posible que aparezcan en tu cabeza un centenar de recuerdos de aquellos años cuando eras escolar y no tenías preocupaciones. Bueno, sólo dos, hacer tus tareas y sacar buenas notas en los cursos.
Uno de los momentos que muchos recordamos es la celebración de cumpleaños en el colegio. Estos días eran increíbles porque hacíamos un alto a nuestras actividades para poder compartir un bonito momento con nuestros amigos. Nosotras hemos destacado cinco cosas que extrañas de esta celebración. Es posible que hayan más y nos gustaría que nos cuentes en los comentarios.
1. Nada estaba planeado. Quizás en el momento no te dabas cuenta, pero tus papás organizaban la fiesta con semanas de anticipación y todo lo que compraban lo escondían muy bien para que tú no te enteres de nada. Lo genial era cuando aparecían en tu salón con toda la carga de regalos, dulces y demás.
2. El payaso. Este personaje aparecía para animar a todos tus compañeros. Podríamos asociarla muy bien a la "hora loca" que no puede faltar en los cumpleaños. Él te hacía cantar y bailar. Hacía dos preguntas clásicas a tus amigos: "¿cómo se llama el cumpleañero?" y "¿cuántos años cumple?"
3. La piñata. Llena de dulces y juguetes. Este elemento era el más esperado por los niños, quienes no dudaban en darle golpes certeros para que caiga y sacar todo su contenido.
4. Los recuerdos. Un pequeño regalito y la torta, ya sea en cajita o en bolsa con la impresión de tu dibujo favorito, conformaban el "pack" perfecto.
5. El elemento amarillo. Si no lo comiste en una fiesta de cumpleaños, no tuviste infancia. El popular "chizito fiesta" era servido en los platitos y se acababa en cuestión de segundos. Era el mejor snack de la celebración. Obviamente, este ha desaparecido de tus fiestas.
También queremos resaltar que uno de los actos favoritos de los escolares, y que sigue vigente, es cuando acorralaban en una esquina al cumpleañero y lo bañaban con huevos y harina. ¿Lo hicieron contigo?