Con el tiempo vamos adoptando nuevas costumbres y vamos aprendiendo a no arriesgarnos tanto. Algunas aprenden antes y a otras le toma toda su juventud, lo cierto es que debes estar cambiando de actitudes, sospechas que ya te pareces un poco a tu mamá y por eso estás leyendo este artículo.
¿Te estás convirtiendo en una “señora”? Descúbrelo aquí.
1. Odias los lugares con ruidos fuertes
Ni discotecas o bares, la música fuerte no te deja conversas con tranquilidad y te deja los oídos zumbando. Ya no te llama la atención y prefieres un lugar más relajado para tomar unos tragos con tus amigas.
2. Andas con alguna prenda para evitar el frío
Ya no te arriesgas con ropa corta sin llevar algún abrigo o blazer, quién sabe si hace mucho viento o empieza a llover de improviso. Soportar el frío de la madrugada ha quedado en el pasado.
3. Tus tiendas favoritas son de decoración
Ya no te afana ir de shopping a llenar el clóset ni hacerte de carteras o maquillaje. Ahora que estás independiente quieres decorar tu nuevo espacio y comprar muebles para combinar, qué satisfactorio.
4. No más ropas ceñidas e incómodas
Ahora prefieres la comodidad a la belleza a seguir con los cánones de belleza. Nada de stilettos, bustiers, skynny jeans o tangas. No hay como usar polos holgados, pantalones deportivos y lencería que cubra toda tu zona íntima.
5. Prestas mucha atención a tu piel
Antes invertías mucho en maquillaje, ahora prefieres comprar productos para el cuidado de la piel. Uno nunca sabe cuándo saltará la primera arruga, además hidratar la piel debe ser un hábito diario.
6. ¿Coctéles o cerveza? No, gracias
Antes podías beber diversos coctéles, tragos y hasta cerveza si no había dinero, pero si ahora solo optas por una copa de vino o alguna bebida healthy entonces ya sabes por dónde va el resultado de tu test.
7. ¿Bad Bunny? ¿Quién es él?
Probablemente ya no reconozcas a los artistas urbanos que están de moda, si te conoces a todos los cantantes o grupos noventeros la cosa se va poniendo dramática.
8. Te convenciste que tus papás y la tecnología nunca se conciliarán
Antes te desesperaba que papá o mamá no supiera usar el celular o las redes sociales, pero ya te resignaste y terminaste por convencerte que no aprenderán. ¿Pero si ellos ya aprendieron, será que ya estás más desactualizada?
9. Las ofertas te emocionan
Probablemente antes no ponías tanta atención a los precios, tu sueldo alcanzaba para pagar todos tus caprichos, pero ahora quieres ahorrar y las ofertas, los 2x1 y los cierrapuertas son totalmente aprovechables.
10. Tus fines de semana son otros
Ya no haces planes para una juerga con tu grupo, un viaje intempestivo o dejar que la vida decida. Ahora prefieres utilizar para limpiar tu casa, preparar comida sana, lavar tu ropa o hacer cosas que has planificado con antelación.