Una noticia muy lamentable enluta al mundo de la música tras la repentina muerte de Marie Fredriksson, cantante de Roxette quien falleció víctima del cáncer cerebral.
Es importante conocer más sobre esta enfermedad que año tras año sigue cobrando víctimas. Un tumor cerebral es una masa o un crecimiento de células anormales en el cerebro.
Existen muchos tipos diferentes de tumores cerebrales. Algunos tumores cerebrales son no cancerosos (benignos) y otros, cancerosos (malignos). Los tumores cerebrales pueden comenzar a aparecer en el cerebro (tumores cerebrales primarios), o el cáncer puede comenzar en otras partes del cuerpo y diseminarse al cerebro (tumores cerebrales secundarios o metastásicos).
Los signos y síntomas de un tumor cerebral varían en gran medida y dependen del tamaño, la ubicación y la tasa de crecimiento del tumor cerebral.
Entre los signos y síntomas generales que provocan los tumores cerebrales se encuentran los siguientes:
Nueva aparición o cambio en el patrón de dolores de cabeza
Dolores de cabeza que gradualmente se vuelven más frecuentes y más intensos
Náuseas o vómitos inexplicables
Problemas de la visión, como visión borrosa, visión doble o pérdida de la visión periférica
Pérdida gradual de la sensibilidad o del movimiento en un brazo o pierna
Problemas de equilibrio
Dificultades del habla
Confusión en asuntos diarios
Cambios en la personalidad o el comportamiento
Convulsiones, especialmente en personas sin historia clínica de convulsiones
Problemas auditivos
Los tumores cerebrales primarios se originan en el cerebro mismo o en tejidos cercanos, como las membranas que recubren el cerebro (meninges), los nervios craneales, la hipófisis o la glándula pineal.
Los tumores cerebrales primarios comienzan cuando las células normales presentan errores (mutaciones) en su ADN. Estas mutaciones permiten que las células crezcan y se dividan a una mayor velocidad, y continúen viviendo cuando las células sanas morirían. El resultado es una masa de células anormales, que forman un tumor.
En los adultos, los tumores cerebrales primarios son mucho menos frecuentes que los tumores cerebrales secundarios, en los que el cáncer comienza en otro lado y se disemina al cerebro. (Con información de Mayo Clinic)