Con la llegada del frío también se hace presente la gripe y resfriado la cual provoca malestares físicos y anímicos que pueden interferir con nuestra vida cotidiana y el trabajo. Pero, ¿sabías que puedes prevenir estos síntomas?
Para mantener un sistema inmunológico fuerte e impedir ser nosotros la próxima “víctima” el resfriado y la gripe, en este artículo te mencionamos una lista de medidas para fortalecer las defensas y prevenirlos. ¡Atenta y toma nota!
Descansa lo máximo posible. Dormir las horas necesarias permite que el organismo recupere fuerzas, especialmente si se presenta fiebre.
Evita el frío y la humedad. Dado que estos virus prefieren las bajas temperaturas y la humedad, evita estos ambientes, así como los cambios bruscos de temperatura y las bebidas muy frías.
Lávate las manos con frecuencia. Hazlo con agua y jabón durante al menos quince segundos, poniendo especial atención a la zona entre los dedos y debajo de las uñas. También conviene limpiar las superficies de la casa con productos antibacterianos.
Incorpora vitaminas y minerales en tu dieta. Las frutas y verduras son fuente de vitaminas y minerales que ayudan a desarrollar defensas. Potenciarlas en tu alimentación te ayudará a recuperarte más rápido.
Bebe mucho líquido. Estos ayudan a eliminar la mucosidad, previenen la deshidratación y alivian el dolor de garganta: agua, zumos y sopas no demasiado calientes. Por el contrario, deben evitarse las bebidas alcohólicas.
Deja de fumar y evitar los ambientes con humo. El tabaco irrita todavía más la garganta y las mucosas, al igual que respirar el humo de otros fumadores.
Haz gárgaras con agua caliente con limón y miel. Su acción emulgente calma el dolor de garganta. A pesar de la creencia popular, es preferible emplear agua frente a la leche con miel, ya que los lácteos pueden aumentar la mucosidad.
Recurre a soluciones salinas o vahos de eucalipto para aliviar la congestión. En el caso de niños pequeños, se recomienda el lavado nasal con suero fisiológico quince minutos antes de las comidas y antes de ir a dormir, para que puedan descansar correctamente.
Consulta al profesional sanitario y evita la automedicación. Es indispensable contar con el asesoramiento del farmacéutico o del médico a la hora de recurrir a antigripales, descongestivos o analgésicos que alivien los síntomas de estas afecciones.
Sé responsable con los antibióticos. Además de que no son efectivos contra el catarro y la gripe, ya que estos están causados por virus y no por bacterias, el hecho de utilizarlos de manera incorrecta o frecuente puede provocar que tu organismo se haga resistente a ellos.
(Información compartida del portal EFE)