Debido a las diferentes actividades que realizamos a diario, muchas veces nos queda corto el tiempo por las mañanas, por lo que para llegar a tiempo al trabajo agilizamos el paso para poder llegar a tiempo. Ante esta situación, ¿sabías las personas que caminan rápido viven 15 años más que los demás?
Sí, así como lo lees. Un estudio científico realizado por la Universidad de Leicester de Inglaterra, sostiene que, sin importar el peso o estado físico de una persona, si este camina más rápido en diez años se puede alargar la vida, en comparación de las personas que camina suave.
Para llegar a este resultado, el equipo de investigación realizó un estudio a un grupo de mujeres de 56 años en promedio de 10 años de 2006 y 2016, en el cual se llegó a la conclusión que las personas que caminan rápido tienen larga vida.
“Las mujeres que caminan de manera ágil mostraron una expectativa de vida entre 86,7 y 87,8 años, mientras que las mujeres que caminan lento mostraron cifras de tan solo 72,4 años”, dice el estudio citado por la Universidad Británica.
En el caso de los hombres, el resultado obtenido del estudio indica que los caminantes vigorosos viven entre 85,2 y 86,8 años, contra tan 64,8 años de los que no.
Ante estos resultados, los científicos señalan que sus hallazgos podrían ayudar a aclarar la importancia relativa de la aptitud física en comparación con el peso corporal en la esperanza de vida de las personas.
"En otras palabras, los resultados sugieren que, tal vez, la aptitud física sea un mejor indicador de la esperanza de vida que el índice de masa corporal (IMC), y que alentar a la población a caminar más enérgicamente puede añadir años a sus vidas", concluye Tom Yates, uno de los autores del estudio de la Universidad de Leicester.