La enfermedad de parkinson requiere una especial atención. Se trata de la segunda enfermedad neurodegenerativa en frecuencia, y se espera que su prevalencia se duplique en nuestro medio durante los próximos 25 años.
El doctor Diego Ruiz, Coordinador de l’Institut Neurològic del Hospital Quirónsalud Palmaplanas, asegura que al tratarse de una enfermedad bastante tratable, debemos divulgar su conocimiento, pues aún se encuentra diagnosticada menos de lo deseable.
Si en algún caso, sospecha que puede padecer la enfermedad de parkinson, es importante saber que se han conseguido avances importantes en el conocimiento de la enfermedad, es posible tratarla y mejorarla.
El especialista afirma que el parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente y se produce por multitud de factores, de los cuales, estos tres son los principales:
1. Edad
Ello explica que afecte al 2% de las personas mayores de 65 años. También por ello es más frecuente en aquellos países con mayor esperanza de vida.
2. Agentes tóxicos y ambientales
Vivir en un medio rural ha sido asociado a un mayor riesgo, probablemente por el consumo de agua de pozo y el uso de pesticidas. Parece ser que la exposición a metales pesados tiene alguna relación con la enfermedad. Sin embargo, el consumo de café acaso tenga un efecto protector ante la enfermedad.
3. Condicionantes genéticos
En los últimos años, se ha descubierto una gran cantidad de genes implicados en el desarrollo de la enfermedad.
Pero el especialista también nos informa cuáles son los principales avances en el tratamiento de esta enfermedad.
“Hemos conseguido ahondar en el conocimiento de la enfermedad y actualmente, disponemos de un amplio arsenal terapéutico, con el que mejorar de modo muy notable los síntomas sufridos por los pacientes”, manifiesta el doctor Diego Ruiz
1. Farmacología
La elección más frecuente. Disponemos de una gran variedad de medicamentos. La mejoría suele ser espectacular y casi inmediata en la mayoría de los casos. Básicamente utilizamos precursores de la dopamina y agonistas dopaminérgicos.
2. Rehabilitación motora especializada
Es conveniente y recomendable en casi todos los casos.
3. Intervención quirúrgica con estimulación cerebral profunda
Utilizada en muy pocos casos, en pacientes muy seleccionados.
“Por último, me gustaría lanzar un mensaje de tranquilidad a aquellas personas que han sido diagnosticadas. Si padeces dicha patología, tranquilízate, actualmente contamos con tratamientos muy eficaces, capaces de mejorar los síntomas de modo muy notable. En cualquier caso, ponte en manos de tu neurólogo de confianza”, finaliza el médico.
Con información de Efe.