Con escenas que ponen a prueba la moralidad colectiva, esta serie de Netflix expone el lado oscuro de la fama y la política.
Únete al canal de Whatsapp de WapaSi buscas una serie que te lleve a explorar el lado más profundo de nuestra relación con la tecnología, esta historia es perfecta. Creada por Charlie Brooker, esta producción, una de las más populares de Netflix, te sumerge en escenas que combinan innovación, emoción y una buena dosis de reflexión. Con capítulos que plantean preguntas éticas y morales, "Black Mirror" inicia fuerte y solo su primer capítulo te dejará sin palabras.
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Con episodios inolvidables, "Himno Nacional" es presentado como una introducción impactante a lo que se convertiría la esencia de "Black Mirror": cuestionar nuestros valores éticos en situaciones extremas.
El capítulo, estrenado en diciembre de 2011, plantea el secuestro de la princesa Susannah, un miembro querido de la realeza británica. El único requisito para su liberación es que el Primer Ministro, Michael Callow, transmita en vivo un acto humillante: mantener relaciones íntimas con un cerdo frente a las cámaras de todo el país.
A lo largo del episodio se muestra cómo el gobierno, los asesores y la sociedad reaccionan ante esta solicitud, planteando dilemas éticos y morales extremos. En sus escenas, "Himno Nacional" expone la naturaleza voyerista de la sociedad actual, al mostrarnos como los ciudadanos, que rechazaban el pedido inicialmente, caen ante el morbo y se ven atraídos por ser testigos de cómo el Primer Ministro cumplirá la exigencia del secuestrador.
Si bien al principio miran con atención lo que pasa, finalmente se alejan de sus pantallas al ver la desagradable escena. El final de este capítulo revela un giro irónico que deja al espectador cuestionándose sobre la moralidad colectiva y la hipocresía social actual.
Para ver el capítulo 1, 'Himno Nacional' de "Black Mirror", INGRESA A ESTE LINK.