Trágico final: anciano pierde la vida nadando en playa mientras se izaba la bandera roja
El hombre había llegado a la playa para pasar un buen momento, pero terminó perdiendo la vida. La bandera roja que advertía el peligro recién se estaba izando.
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Un turista británico terminó falleciendo luego de haber ingresado a nadar a la playa de Racó en Cullera, en Valencia, España. El anciano de 77 años no pudo la bandera roja que se venía izando por parte de los socorristas del lugar.
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Según informó Mirror, los salvavidas habían advertido a los visitantes de lo peligrosa que era el mar, pero todo hace indicar que esta información no le terminó llegando a la víctima, quien ya había ingresado al dicho lugar.
Alrededor de las 11:30 de la mañana, los socorristas fueron alertados que un hombre estaba ahogándose. La marea se encontraba muy alterada por las fuertes corrientes que se habían desarrollado.
Luego de ser rescatado, paramédicos llegaron y le practicaron los primeros auxilios. Incluso, le aplicaron un RCP (Reanimacón cardiopulmonar) que es un procedimiento de emergencia para salvar la vida cuando alguien dejó de respirar o su corazón cesó en su pálpito.
Pese a los esfuerzos que duraron 30 minutos, no lograron salvarle la vida. El citado medio informa que no es la primera vez que ocurre este tipo de incidentes en el complejo turístico, que se encuentra al sur de la ciudad de Valencia.
Pobladores piden más cuidado con la playa
En ese sentido, la población que vive cerca a la mencionada playa han pedido a los turistas que tengan mucho cuidado con el infortunado hecho. "Sean responsables, por favor", fue el mensaje comunitario que han enviado.
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Señalaron que en el año 2015, un hombre de 56 años sufrió un infarto mientras luchaba por salir del mar. Lamentablemente, no pudo ante la fuerza natural y terminó siendo arrastrado. Esperan que los bañistas puedan hacer caso a las recomendaciones.
"No queremos criminalizar a nadie, pero hay gente que no hace caso a las banderas. Hay que hacer un llamamiento a la responsabilidad de los bañistas", agregaron.
Cullera tiene fama de tener fuertes corrientes, y en general las playas valencianas sufren con frecuencia corrientes de resaca provocadas por ráfagas de viento que empujan grandes olas hacia la orilla. Debido a la poca profundidad de las aguas, hay poco espacio y las corrientes se precipitan hacia el mar arrastrando a la gente.