El presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, envió una carta notarial a la congresista Patricia Chirinos, quien acusó al premier de una agresión verbal cuando se instalaba la Junta Preparatoria y le solicito la oficina donde laboró su padre, Enrique Chirinos.
"Le expreso que usted le ha mentido al país en razón a que jamás la ofendí con frase alguna que nunca dije", indica el premier en el documento con fecha del 6 de septiembre.
Además, indicó, que todo lo señalado por Chirinos, son el resultado de una creación política perversa de un dicho inexistente que responde a una campaña de demolición contra su persona y el actual Gobierno iniciada en el mes de agosto por los principales actores políticos de oposición.
También dijo, que todas las declaraciones de la parlamentaria, las cuales considera una verdadera calumnia, son con objetivo de corto y mediano alcance de desestabilización de la democracia.
Guido Bellido insiste en la carta notarial que la parlamentaria Patricia Chirinos está mintiendo al Perú y señala que él es quien sufre una agresión moral. Finalmente, el Premier advirtió a Patricia Chirinos que, en caso de no hacer la rectificación adecuada, se verá obligado a interponer una denuncia ante el juez penal por difamación agravada.
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“Por favor quisiera que me ayuden y me den esta oficina que ha sido de mi padre y tengo muchos sentimientos hacia esa oficina. Por favor ayúdenme. Y Bellido me dijo ‘que te preocupas de eso, anda cásate’, y yo le dije ¿perdón? he sido soltera, casada, divorciada y ahora soy viuda y me dijo: ‘entonces ahora solo falta que te violen’. Él me lo dijo directamente”, alegó la parlamentaria semanas atrás.
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En la carta notarial, Bellido le indica a Chirinos que miente al país y que jamás la ofendió con alguna frase. “Usted le ha mentido al país en razón a que jamás la ofendí con frase alguna que nunca dije, y que son el resultado de una creación política perversa”, alega el titular de la PCM.
En esa línea, el premier alega que una persona que sufre una agresión moral denuncia con pruebas fehacientes dentro de las 24 horas a la autoridad competente y no espera que pasen 30 días en una reacción “extemporánea sospechosa”, que hoy pretende con pruebas falsas.