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14 Abr 2021 | 19:11 h

Marco Avilés, especialista en racismo opina sobre ataques a Pedro Castillo

“Esa narrativa del cholo o serrano que viene a usurpar el poder es bien del siglo XIX”, señaló el experto.

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    Pedro Castillo: redes se llenan de ataques racistas tras triunfo en primera vuelta | Foto: Aldair Mejía/La República

    Este 11 de abril se realizaron las Elecciones Generales donde millones de peruanos demostraron sus preferencias al votar para elegir el próximo presidente, congreso y Parlamento Andino.

    Sin embargo, luego de unas horas, cuando Pedro Castillo salió ganador en primera vuelta, un panorama racista se hizo viral en redes sociales.

    Nefastos memes enfocados en su origen andino, su forma de vestir, su color de piel, manera de hablar y condición social. A continuación te compartimos la entrevista completa que realizó Diario Trome al periodista Marco Avilés, especialista en temas de racismo, autor de los libros ‘De dónde venimos los cholos’ y ‘No soy tu cholo’. En esta conversación el escritor desmenuza esta problemática que aqueja al país, pese a estar a puertas de celebrar el bicentenario.

    “El cholo discrimina al cholo, porque el cholo entiende que la única forma de sobrevivir en nuestra sociedad es que te posiciones arriba de otro a quien puedas insultar”, dice Avilés, abanquino de nacimiento.

    Marco, estos ataques racistas contra el candidato Pedro Castillo, ¿qué nos revelan como sociedad?

    Para mí es interesante analizar esto porque creo que a muchas personas les es difícil hacer de lado la política y lo que Pedro Castillo representa. Lo que uno tendría que hacer, y es difícil, supongo, es analizar sus políticas, sus propuestas y sacar una conclusión y uno puede estar a favor o en contra. Pero lo que está pasando es que como Castillo es una persona de la sierra, de los andes, es profesor, indígena, y todas estas características que él encarna, esto saca lo peor de los peruanos. Y teniendo en cuenta que el Perú es un país racista, con un racismo anti-indígena muy fuerte. Entonces, esta gente está liberando todo eso y no está opinando sobre la política de esa persona, sino está opinando en contra de que una persona como él esté primero en las intenciones de voto.

    ¿Y esta situación qué dice de nosotros? Sobre todo, cuando estamos a puertas del bicentenario, cuando nos suponemos un país que busca el desarrollo.

    Mira, es un tema bastante complejo porque esto va más allá, incluso, del insulto. Las personas están compartiendo insultos, memes, disfrazando a Pedro Castillo de un montón de cosas, ¿no? Y se están burlando de su manera de hablar. Están haciendo memes sobre cómo hablan las personas quechuahablantes y creo que lo único que están logrando es, digamos, cargar de mayor tensión el ambiente político, porque están convirtiéndolo en una víctima, y es una víctima de racismo, obviamente. Esto está echando mucho fuego porque, como dices, estamos a punto de cumplir 200 años y sigue ocurriendo.

    Ahora, el fenómeno de Castillo es mucho más interesante porque encarna ese Perú que desde Lima y desde la mirada limeño-céntrica no existe. A tal punto no existe que, por ejemplo, la mayoría de canales de televisión no le han dado espacio. O sea, es una porción del país a la que no se le da espacio en los medios. Y no solo eso, sino que se les trata como se los trataba en el siglo XIX, como una amenaza. Porque esa narrativa del cholo o serrano que viene a usurpar el poder es bien del siglo XIX.

    ¿A qué se le asocia al cholo?

    En ‘Diccionario de peruanismos’, de Juan de Arona, el concepto de cholo está asociado a ese personaje que viene de los andes a Lima a usurpar el poder. Entonces, esa narrativa del serrano usurpador, de la amenaza, está muy fuerte en el Perú. Y eso es lo que está vivo ahorita. Una figura como Castillo a muchas personas de la costa, de Lima, les levanta este terror, este miedo al invasor.

    ¿Por qué el cholo discrimina al cholo?

    El racismo no solamente consiste en que los blancos discriminan a los negros o a los cholos. Entre cholos, entre personas afroperuanas, también hay esa violencia. Pero hay una cosa muy interesante que es la idea del ‘blanqueamiento’. Esto viene de la colonia, de la época de las castas, donde había esta idea que si tú te casabas con una persona blanca, siendo tú indígena o negro, tus hijos iban a estar más cerca de ser blancos. Esta idea crea situaciones en donde todavía las personas cholas se discriminan unas a otras porque unas se sienten más ‘blancas’ que las otras. Entonces tienes a dos personas indígenas, pero una viviendo en la costa y otra viviendo en los andes, la de la costa se va a sentir superior a la de los andes.

    Ahora, es interesante con los memes, porque mucha gente dice: ‘Oye, pero esos memes también lo están compartiendo en Cajamarca, así que no son racistas’, pero el racismo no existe solamente en Lima, el racismo existe en todo el mundo. Hay racismo en Lima y en los Andes. Porque cuando tú vas a los Andes ves que las personas de la ciudad discriminan a las personas que viven en las comunidades indígenas. Y dentro de las comunidades indígenas también hay discriminación, porque hay esta idea de que alguien tiene que ser superior y alguien inferior.

    Muchos entienden que si el mismo atacado se ríe de esas bromas racistas, es porque no hay racismo, porque no le molesta…

    Ahí está la dimensión del racismo que está internalizado. O sea, uno internaliza la inferioridad. Uno se convence de su inferioridad y aprende a esconder quién eres, aprende a esconder su idioma, disfraza sus rasgos físicos, precisamente para que no lo discriminen. Cuando las personas indígenas, cholas, a veces comparten estos memes y se ríen, no quiere decir que el meme o el chiste no sea racista, sino que las personas han internalizado el racismo al punto que lo que es racista les parece normal. Por eso es que el cholo discrimina al cholo, porque el cholo entiende que la única forma de sobrevivir en nuestra sociedad es que te posiciones arriba de otro a quien puedas insultar.

    ¿En qué pequeños detalles, que tal vez de manera inconsciente practicamos, encontramos racismo?

    Ahora, por ejemplo, la idea de que Lima está mejor educada que el resto del país y que por eso Lima toma mejores decisiones políticas, por ejemplo. La idea de que Lima vota mejor que el resto del país. O sea, esa es una idea muy arraigada, cuando dicen: ‘No hay que darle mucho poder a las provincias porque ellos eligen mal, votan mal, son salvajes’. Otra, la idea de que quien habla mal el castellano es bruto, eso es un clásico, y no solo con Pedro Castillo, sino con César Acuña. Hubo mucha gente y periodistas que se han burlado de Acuña por su forma de hablar. Pero el español no está mal hablado o bien hablado, o sea, todos los españoles son igual de válidos.

    Nosotros castigamos el español de las personas quechuahablantes, que son bilingües, y eso es estúpido porque, por ejemplo, cuando uno aprende inglés y se muda a otro país como Estados Unidos, tu inglés no es perfecto, no es igual al inglés de los nativos. Entonces, la gente lo nota, pero no te hacen sentir mal. En el Perú, a las personas que son bilingües se les trata como animales, como si hablar dos idiomas estuviera mal.

    ¿Estos ataques racistas hay que visibilizarlos o no hay que darles importancia?

    Depende del espacio. Por ejemplo, si en tu familia brotan estas discusiones, estos chistes, uno puede como que discutir y conversar con las personas, hacerles notar. En las redes sociales es un poco más salvaje. Pero creo que si tú ves a alguien que está siendo racista y compartiendo mensajes racistas creo que podrías hacerle notar mandándole un inbox, por ejemplo. Cuando haces estas correcciones en público, a veces la gente se pone muy a la defensiva. Lo que yo quiero decir es que sí hay que hacerlo notar, pero hay que ser muy cuidadosos de cómo y dónde. Cuando las personas son públicas, líderes de opinión, autoridades, artistas, gente visible, creo que, en este contexto en particular, tienen que ser muy cuidadosas de lo que dicen sobre los candidatos. Y ya no estamos hablando solamente de Castillo, también de Keiko Fujimori, porque ella es de origen asiático y hay mucho racismo alrededor de las personas de origen asiático. Uno puede estar en contra, considerar que es el ‘demonio’ en términos políticos, pero tienen que criticarlos en términos políticos, no tienes que hacer referencia a su físico, a cómo hablan, a cómo son sus ojos, al color de su piel, si son de los Andes, si son cholos, indios. Eso va a ser crucial en esta segunda vuelta.

    Además de hacerlo notar a nuestro entorno cercano, ¿qué más podemos hacer?

    Una cosa importante es que la gente se pone a la defensiva cuando les dices ‘oye, tú eres racista’, decirle a alguien racista es como decirle criminal o demonio. Entonces, es importante decirles a las personas ‘tú estás haciendo algo racista o discriminatorio’. Eso ayuda un poco más a conversar con las personas.

    ¿Qué otros mensajes te han dejado estas elecciones en Perú?

    Uno de los principales es que hay el Perú indígena, el Perú andino, el Perú amazónico, el Perú negro, este Perú que no tiene acceso a los medios de comunicación, que no tiene acceso a las plataformas de discusión política, que no tiene acceso a estar en la tele, a participar en los debates. Creo que es importante romper esto. De la misma manera, por ejemplo, las personas que analizan la política suelen ser de Lima. Con todas las taras, los prejuicios, la distancia que uno tiene viviendo en Lima, Lima analiza todo el país. Entonces la pregunta es: ¿por qué no se diversifica todo esto? Necesitamos voces indígenas, negras, nikkei, tusán, lgtbi contando y analizando la política. Ese será el gran reto que nos está dejando estas elecciones.