Billie Eilish fue una de las grandes protagonistas de la alfombra roja de la MET Gala gracias al voluminoso vestido firmado por Oscar de la Renta que modeló. No conforme con los suspiros generó su primer look, la artista defendió su título como anfitriona del evento más importante de la moda con el outfit que llevó para el after party de la ceremonia.
Al igual que el espectacular vestido de fiesta con el que Eilish llegó al evento, su segundo vestido rindió homenaje a los diseñadores de vestuario que "realmente le dieron forma a la historia de la moda de Estados Unidos", indicó Dena Giannini, directora de estilo en la versión británica de Vogue antes de la gala. Mientras que el primer outfit de Billie se inspiró en el vestido de Charles LeMaire que Marilyn Monroe tomó prestado del departamento de vestuario de 20th Century Fox para los Oscar de 1951, su segundo outfit rindió homenaje a la legendaria Edith Head.
Como recordamos, fue una diseñadora de vestuario estadounidense que ideó el inolvidable vestido blanco con cintura de avispa que usó la futura princesa Grace en la película de Alfred Hitchcock ‘To Catch a Thief’. Heath llegó a ganar ocho premios de la academia y además de ser considerada uno de los máximos exponentes del diseño en Hollywood, permanece siendo la mujer con más premios Óscar en la historia del cine.
Fernando García y Laura Kim de Oscar de la Renta tuvieron la increíble tarea de reinventar el vestido blanco sin tirantes que llevó Grace Kelly en el thriller de 1955 pero siempre conservando su esencia. Si bien los creativos cambiaron el color por un rojo más intenso (posiblemente para encajar más con el ambiente del after party), la pieza conservó la misma fluidez y la grandeza que el original.
El vestido presentaba una elegante capa para un atractivo extra del Old Hollywood y una abertura a la altura del muslo. Este detalle añadió sensualidad y modernidad al look, además de darnos un vistazo del tatuaje que Billie reveló por primera vez en su portada viral de British Vogue.
"Al igual que LeMaire, la diseñadora Edith Head tuvo un enfoque tan meticuloso de su hermoso trabajo, y eso es especialmente claro en las piezas que creó para To Catch a Thief de Hitchcock", explicó Giannini a British Vogue. Sin duda, fue otro look ganador que reafirmó el título de Eilish como una de las mejores vestidas del evento.