Un cabello sano, bonito y radiante es el resultado de una suma de factores y productos indispensables que nos brinden un acabado resplandeciente. Dentro de ello es importante aplicar un orden correcto si queremos sacarle el máximo partido a estos elementos que favorecen el aspecto de nuestra melena.
A diferencia de la limpieza facial -en donde se opta por ir desde los productos más ligeros hasta los más densos-, en el cuidado capilar se sugiere hacerlo a la inversa, según explicaron los estilistas especializados Yianni Tsapatori y Hiral Bhatya para Vogue.es. A continuación, te contamos cuál es el orden más apropiado para aplicar los principales productos capilares que va desde el champú, crema de peinar, gel y sprays.
Lo más fundamental para el cuidado capilar es elegir un champú acorde a nuestro tipo de cabello y que tenga una fórmula adecuada. Ya sea para un pelo seco, graso, maltratado, teñido, etc, es importante verificar las etiquetas e información complementaria antes de adquirir el producto.
Al respecto, Hiral Bhatya recomendó lo siguiente: “Elige el champú según el tipo de cuero cabelludo que tengas”. Y continuó: “Te basta con una pequeña cantidad del tamaño de una moneda. Evita los ingredientes agresivos, como los parabenos, los sulfatos, los químicos, ya que los ingredientes naturales van a proteger más que ninguna otra cosa la salud de tu pelo. Si tienes el cuero cabelludo graso, lo que mejor te va es un champú purificante. Si por el contrario es seco, apuesta por productos que sean nutritivos, hidratantes y suavizantes. Los champús tratantes, como el anticaspa, solo se deben usar una vez a la semana. Altérnalo con un champú hidratante para optimizar los resultados”.
Lo más frecuente es pasarse siempre del champú al acondicionador; no obstante, podemos ir un paso más allá y apostar por una dosis extra de hidratación y nutrición, sobre todo, si es un cabello dañado por el tinte o algún tratamiento capilar. Sobre ello Yianni Tsapatori refirió que “las mascarillas acondicionadoras intensas son un remedio rápido, ya sea para mimar tu melena un poco más, darle un buen repaso después de una coloración, rehidratar la fibra capilar, reparar los daños de las herramientas de calor, reparar puntas abiertas o darle vida al cabello. Aplica la mascarilla antes del acondicionador, no después. El champú abre los folículos pilosos, de modo que, si ponemos la mascarilla justo después del lavado, los ingredientes acondicionadores penetrarán mejor. Déjala reposar de 3 a 20 minutos y aclara. Úsala solo una vez por semana”.
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Para este caso tiene mucha influencia el tipo de pelo que uno tenga ya sea seco o graso para aplicar la cantidad correcta siempre de medios a puntas. “Elige el acondicionador según la textura del cabello. Si tienes el pelo seco y fino, te aconsejaría un acondicionador con base de gel que hidrate sin añadir demasiado peso. Los acondicionadores en crema van bien para el cabello seco y grueso. Si tienes el pelo dañado, busca que en la etiqueta diga reparación o antiencrespamiento. Los términos como volumen, ligero o equilibrante son buenos para el pelo graso”, recomendó Bhatia para Vogue.es.
En este paso para reforzar la hidratación vamos a usar una fórmula ligera que se puede hallar en una crema, loción, spray o aceite como los que otorgan los tratamientos sin aclarado. Antes de comenzar con el peinado este paso es clave. “El acondicionador sin aclarado es un paso clave justo antes del peinado”, comentó Tsapatori. “Elígelo basándote en tu tipo de cabello. Utiliza un aceite, seguido de un serum, si tienes el pelo seco o dañado. Si tu pelo es graso, evita recargarlo con mucho producto. Con unas cuantas gotas de aceite de argán es suficiente para alisar y darle brillo al pelo, es lo que yo uso. Empieza a aplicarlo desde la nuca y hacia arriba”, concluyó Bhatia.
En este último paso todo dependerá del acabado que quieras otorgarle a tu cabellera según sea la ocasión. Si vas a utilizar alguna herramienta de calor lo mejor será emplear un protector en spray para proteger la salud de tu pelo. Ahora si lo que se busca es obtener volumen entonces puedes optar por un poco de espuma, laca o un spray de textura que le brinde un acabado messy.