Últimamente, no paramos de lavarnos las manos; este buen hábito con el cual está demostrado que es la medida número para combatir cualquier infección y especialmente la del COVID-19, también tiene su lado menos atractivo. Día tras día, las manos se resecan, aparecen grietas en los dedos, las uñas y su contorno se lastiman.
Por ello, los expertos proponen nuevas medidas para cuidar y proteger la piel de nuestras manos eficazmente, ya que a pesar de ser una parte esencial de nuestro cuerpo, no les damos el cuidado que ameritan. Incluso, se piensa que recibir un masaje en las manos es tan placentero como uno podal.
Como la reflexología podal, en las manos hay un mapa al igual que en los pies, la única diferencia es que en los pies es más sensible, pero es de lo más beneficioso. Sentir la presión en la plana es algo buenísimo porque estamos todo el día trabajando con ellas, mucho se habla de los pies pero las manos también es fundamental sin desmerecer a la parte que nos sustenta todo el día. Un masaje en las manos es muy placentero y sirve para liberarlo tensiones, dolores.
Por ello, después de cada aplicación de alcohol en gel o de cada lavado es importante utilizar un tratamiento de hidratación profunda que le devuelva la suavidad y los aceites naturales que la piel pierde al estar en contacto con el agua y agentes limpiadores.
Y si vas a usar un tratamiento de belleza más intensivo como un aceite, serum o mascarilla, los expertos recomiendan realizarlo antes de dormir para que el descanso ayude a la regeneración de la barrera protectora natural de la piel.
Con información de: Europa Press
