Dieciséis años son los que Daniel Vercchelli tiene en el negocio de la alta sastrería y dieciséis fueron los años los que le tomó llegar a una de los eventos más importantes en el mundo de la moda: el New York Fashion Week. Y lo hizo. Para los que no lo conocen, Daniel Verchelli es un diseñador peruano conocido por sus diseños de trajes nupciales hechos a la medida y que este año causó sensación internacionalmente en la plataforma ‘Fashion Designers of Latin America’ por la fusión de sus diseños formales con la integración de la esencia peruana. Wapa.pe habló en exclusiva con Vercchelli para conocer más sobre su experiencia en la Semana de la Moda de Nueva York, las tendencias de moda más frescas y el crecimiento de esta industria en el Perú.
¿Cuál fue la inspiración para la creación de tus trajes?
- Hemos hecho trajes que nos identifican como peruanos. El trabajo que nosotros realizamos es de alta sastrería y a donde vaya - cómo todo peruano- tenemos la ‘blanquirroja’ en el interior, en la sangre. Entonces, eso es lo que he podido mostrar allá, nuestra bandera a prácticamente todo el mundo. Eso es algo que ha llamado mucho la atención, que nuestros trajes tengan impregnada la bandera peruana, pero de una manera muy sutil.
¿Cuáles fueron las mayores tendencias de moda que pudiste apreciar en el New York Fashion Week?
- La tendencia en Nueva York es lo urbano, porque ellos siguen más ese estilo. En temas de alta costura – que es lo que nosotros producimos- no hay mucho. En realidad, la tendencia es más callejera. Así mismo, los colores llamativos como rosados verdes, y materiales más sintéticos están súper de moda. En cuanto a calzado, andan más con zapatillas de diferentes acabados. Incluso hay personas que están con traje y zapatillas.
¿Crees que el Perú está en buen camino en cuanto a desarrollo del mundo de la moda?
- Recién estamos empezando. Perú aún no es conocido a nivel mundial como un país que produce moda, somos más conocidos por ser un país gastronómico y turístico. Por otra parte, pienso que el gobierno no apoya a la industria de la moda. Yo he visto casos donde diseñadores de Suiza, son respaldados por sus embajadas para que vayan a otros países. En nuestro caso, yo he podido llegar hasta PromPerú y me han dicho puntualmente que ellos solo apoyan cuando hacen una rueda de negocios en otros países, pero más allá de eso no. Tú tienes que viajar con tus propios recursos. Yo, además de hacerme conocido como diseñador, quiero que el Perú se haga conocido en el mundo de la moda.
¿Llegar a presentar tus diseños en las Semanas de la Moda más importantes del mundo siempre fue tu objetivo cuando te incursionaste en el mundo de la alta sastrería?
- Sí. Desde un inicio mi objetivo ha sido traspasar fronteras.
¿La moda neoyorquina (estadounidense) es más inclusiva que la peruana?
- Allá la moda es más libre y hay mucha libertad en el sentido de que sus creaciones son fuera de lo común, y en parte creo de eso se trata la moda: de que los diseñadores puedan lanzar las colecciones que ellos quieran y sean piezas que nunca hayas visto antes. Hay moda para todos los gustos.
¿Algún día el Perú llegará a ese nivel de libertad en cuanto a moda?
- Pienso que acá todavía no hay cultura para vestir ese tipo de prendas o estilos porque aquí todavía somos muy reservados mientras que allá hay más libertad para que puedas vestir prendas como de esa honda.
¿Crees que todas esas vivencias te influenciarán para crear diferentes tipos de sastres para diferentes ocasiones como alfombras rojas?
- Como diseñador, cuando voy a desfiles en distintas partes del mundo, me gusta ver las tendencias y pensar cómo puedo aplicarlas para la moda de Perú y quizás para algunos diseños de alfombra roja. Porque también nos gusta hacer cosas distintas, pero siempre con una honda más formal y más recatada, con mi esencia.
Con grandes aspiraciones y sobretodo grandes ideas en mente, el diseñador peruano, Daniel Vercchelli se proyecta a seguir conquistando pasarelas internacionales con sus creaciones formales fusionadas con la identidad peruana de manera chic. Solo el tiempo dirá si seguiremos viendo más de él en el futuro.