Esta idea totalmente sencilla y económica será el próximo éxito en decoración para tu espacio o refugio si la empleas y personalizas con la guía que tenemos para aplicarla. No es necesario que compres una cabecera para tu cama para darle un toque más original a este espacio tan personal, como único.
Siendo este lugar de nuestros favoritos por ser el de descanso, recarga de energía, refugio de historias o cuna de ideas es importante dotarlo de un poco de nuestra personalidad, aunque nuestro presupuesto no sea el más grande.
Verás que en simples pasos y siguiendo esta técnica muy fácil de aplicar que da el efecto de cabecera falsa, podrás tener ese espacio tan tuyo que será difícil que quieras salir de él.
Cinta masking tape o carrocero
Rodillos
Pintura blanca o la que se prefiera
Pintura metálica o la que se prefiera
1. Delimita con cinta el rectángulo a pintar. Puedes elegir hacerlo a la misma altura del final de los laterales de tu cama o un poco más. En el caso de la altura puedes hacer que llegue hasta el techo para que tenga una división con los otros tonos de pintura de la pared de preferencia.
2. Pinta con rodillo procurando no salirte de los bordes.
3. Crea una cuadrícula con cinta y con la ayuda de una regla o una cinta métrica.
4. Rasga cinta y crea con esos trozos tiras dispuestas de forma aleatoria, creando una red donde predominen las líneas rectas, pero de distintos grosores, para dar ese efecto más natural.
5. Pinta en blanco sobre la cinta. Para evitar que la pintura se “cuele” por debajo de la cinta, es importante no cargar el rodillo de pintura. Es preferible dar varias manos con poca cantidad (lógicamente esperando lo necesario entre capas para su buena adherencia).
6. Retira la cinta y listo.
Ya tienes tu falso cabecero pintado por ti. Intenta poner en práctica esta y más ideas de decoración para personalizar tus espacio sin salirte del presupuesto. ¡DIY!