Las tareas de la cocina pueden ser bastante tediosas si no hay a la mano productos de limpieza efectivos. Aunque gran parte del aseo se puede hacer con agua y jabón, hay manchas y residuos difíciles a los que se les debe aplicar productos especiales.
Todas sabemos que a la hora de hacer limpieza en la cocina nunca nos debe de faltar los desengrasantes. Es que los componentes de estos productos son buenísimos para eliminar los residuos de grasa que muchas veces se acumulan en la estufa, los alrededores de la cocina y en el refrigerador.
Como sabemos que este producto es indispensable y nosotras somos económicamente wapas, hoy te contamos cómo puedes hacer un desengrasante casero. Lo mejor es que serán libres de químicos y esto ayuda nuestra ecología.
1. Jabón Marsella
Solo vas a necesitar:
- 60 gramos de jabón de Marsella rallado
- 1 litro de agua
- 6 gotas de aceite de limón
Cuando tengas los ingredientes, en una olla coloca el litro de agua y hazlo hervir. Una vez que haga ebullición agrega el jabón rallado y lo vas a remover por unos minutos.
Esperarás a que se derrita por completo y que enfríe, para que luego le agregues el aceite de limón.
Una vez que este frío, vas a frotar el desengrasante sobre la zona que quieres quitar el residuo. Déjalo actuar por cinco minutos. Cuando pase el tiempo, con una esponja pasa sobre esa superficie y enjuágalo.
2. Aceite de árbol de té
Para este desengrasantes consigue:
- 500 mililitros de agua
- 15 mililitros de detergente líquido para platos
- 1 cucharada de vinagre blanco
- 15 gotas de aceite de árbol de té
En una olla calienta el medio litro de agua y mézclalo con el detergente líquido para platos. Después de esto, agrega el vinagre blanco y las 15 gotas de aceite de árbol de té.
Vas a rociar el limpiador sobre la superficie que deseas quitar la grasa y frótalo con una esponja. Para finalizar, retira los residuos con un trapo limpio.
3. Bicarbonato de sodio
Solo vas a necesitar:
- 500 mililitros de agua
- 20 gramos de bicarbonato de sodio
- 1/2 limón
- 10 gotas de aceite esencial de eucalipto
En un balde o recipiente echa el medio litro de agua y agrega los 20 gramos de bicarbonato de sodio, el zumo de medio limón y el aceite de eucalipto.
Mézclalo bien y cuando ya esté listo recién lo vas a rociar sobre la grasa y dejarás actuar solo un par de minutos.
Cuando pase el tiempo, lo frotará con un paño de microfibra.