Jaime Garza se convirtió en uno de los reconocidos actores de México por sus interpretaciones en exitosas producciones, pero no todo ha sido de color de rosa en la vida del artista, pues desde joven tuvo que lidiar con momentos trágicos.
De los hechos que más siguen conmoviéndolo, fue cuando terminó su romance hace 37 años con la hija de la famosa actriz Silvia Pinal tras la muerte de la joven. Siendo este un momento que lo llevó varios años de superar la pérdida.
Viridiana Alatriste fue la primogénita de la famosa Silvia, quien mantuvo un romance con Jaime y también era actriz. Pero, antes que tuvieran un romance, él primero salió con su hermana mayor de la fallecida.
Aunque salió con Sylvia Pasquel, confesó este año que en su momento, "no fue una relación muy sólida ni nada con Sylvita, con la Pasquel, fue una amistad entrañable, una cercanía, pero no, no digamos que (fue) una relación duradera, eso no, la quiero mucho a Sylvia Pasquel".
La intérprete murió en los años 80 a través de un accidente automovilístico cuando tenía 19 años saliendo de una fiesta donde Jaime también estuvo presente. Aquello generó una profunda depresión en él, llegando a superarlo y ser fuerte, refugiándose en su carrera artística.
Sin embargo, durante una época el intérprete superó que se difundieran versiones que lo acusaban como culpable por la muerte de Alatriste, pues ella iba sola manejando su auto. Por su parte este año, desmintió la teoría que se rumoreó en su momento, "ella tenía que ir, no dormía conmigo y ya eran tipo 2:00 am".
"Además, iba bien, no iba mal ella, ni enojada ni nada. Al otro día ya estaba yo al teléfono, sí me despertaron. Yo me quedé no sé cuánto tiempo en 'shock' y dije no puede ser".
A pesar que han pasado varios años, Jaime Garza reveló que la recuerda con cariño y aún habla con ella. "Toda la gente que se adelanta no se muere del todo mientras no la olvides, está presente en tu vida".
"Si ves la foto le puedes incluso hablar, conversar. Pero de que te estén escuchando es difícil, no lo sabemos en realidad, qué presencia o qué percepción. Cuando abandonamos este cuerpo nadie sabe exactamente qué pasa".