Fernanda y Rafaela Munar no solo comparten la pasión por el bádminton, también se encuentran unidas por un sueño: clasificar a los Juegos Olímpicos París 2024 y para ello ambas tuvieron que dejar el Perú para someterse a entrenamientos fuertes en Europa, donde se topan con las mejores.
Las mellizas peruanas (16) empezaron a jugar desde los 6 y no han parado de ganar medallas de oro y plata en numerosos campeonatos disputados en Finlandia, Canadá, Eslovenia, Alemania, Bélgica, Estados Unidos, Chipre, Brasil, entre otros países, así como en numerosos torneos en el ámbito nacional.
Hace menos de un mes volvieron hacer noticia porque deslumbraron en los III Juegos Suramericanos de la Juventud Rosario 2022, ya que de las ocho medallas que ganó el bádminton nacional en ese certamen, cinco les pertenecen a ellas en individuales y dobles.
El año pasado las dos se enfrentaron entre sí por el primer y segundo lugar en el Panamericano Juvenil de Bádminton en Acapulco (México) en la categoría sub17. “Enfrentar a Fernanda en una final no es nada fácil porque a nadie le gusta competir contra su hermana, pero en la cancha te olvidas de eso porque es un rival más y hay que ganar”, asegura Rafaela.
Las badmintonistas entrenan en Ibiza (España) y concuerdan que extrañan demasiado al Perú. Dar este paso fue duro para ellas, pero aseguran es parte del esfuerzo que deben hacer si es que desean concretar el sueño de clasificar a los próximos Juegos Olímpicos.
“Extrañamos mucho al Perú porque allí está nuestra raíz, la familia, los amigos, la comida, pero tenemos claro que es parte del sacrificio para seguir creciendo. Nos preparamos para todos los eventos que vengan, nacionales e internacionales y nada nos amilana; en los Juegos de la Juventud Rosario 2022 demostramos que el bádminton nacional está arriba”, dijo Fernanda.
El año pasado, Rafaela y Fernanda se coronaron campeonas de dobles femeninos y finalistas en singles (se enfrentaron), en la categoría sub-17 del Abierto Español de Bádminton 2021. En dobles vencieron a las españolas María Jiménez y Paula Llavero y en singles Rafaela superó a Fernanda.
Las hermanas deportistas, quienes gozan del apoyo moral y económico de sus padres, entrenan a tiempo completo desde este año en España y compiten en los circuitos europeos. Anteriormente lo hicieron en el Club Lawn Tennis de la Exposición a cargo de los entrenadores indonesios Anggy Sepdianto y Faizal Rahman.
“Agradezco demasiado a mi familia porque siempre estuvieron a nuestro lado y queremos seguir superándonos para llegar a unos Juegos Olímpicos y ganar una medalla para el Perú, ese es nuestro sueño seguir entrenando y compitiendo. No es fácil, hay que poner mucho sacrificio, dejar de lado muchas cosas para lograr los objetivos”, manifiesta Rafaela.
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A su turno, Fernanda indicó que “hemos hecho un gran equipo en Rosario y hemos jugado de igual a igual contra las brasileñas, cada punto, cada set, lo hicimos pensando en toda la gente que nos apoya. Creo que debemos seguir preparándonos, viajando, compitiendo porque es la única manera de cumplir nuestras metas”.
Las hermanas jamás se detienen, hoy están conectadas más que nunca por el amor hacía la disciplina de la plumilla con la que buscan tocar la cima del olimpo siempre alentadas por sus padres Alberto y Karina.
Cuando eran pequeñas, tenían 5 años, su madre les dijo Fernanda y Rafaela que eligieran un deporte para dejaran de estar metidas en la computadora sin hacer nada. Fernanda eligió el tenis de mesa y Rafaela bádminton.
Fernanda cambió el tenis de mesa por el bádminton luego que iba a ver a su hermana en los entrenamientos. Le gustó más por la destreza y velocidad que impregnaban en el juego.
Finalmente, Rafaela Munar asegura que quieren llegar a los Juegos Olímpicos en singles y dobles, pero cree que tienen más oportunidades en dobles porque les va mejor y se sientes cómodas jugando juntas.
El bádminton es un deporte muy similar al tenis que se juega en una pista más pequeña. El enfrentamiento es por parejas y los encuentros se disputan a tres mangas de 15 puntos cada una.