Javier Pérez de Cuéllar es uno de los peruanos más ilustres del siglo XX y parte del nuevo milenio. Durante el gobierno de transición de Valentín Paniagua fue el premier, pero a la vez ostentó el cargo de titular del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Únete al canal de Whatsapp de WapaJavier Felipe Ricardo Pérez de Cuéllar de la Guerra nació en Lima el 19 de enero de 1920. Fue hijo de Ricardo Pérez de Cuéllar y de Rosa de la Guerra Cevallos. Sus estudios básicos los desarrolló en el colegio San Agustín y tras concluir su secundaria ingresó a la Universidad Pontificia Universidad Católica del Perú para seguir estudios de derecho.
Tras concluir esta carrera profesional decidió realizar prácticas profesionales en el Ministerio de Relaciones Exteriores y es ahí que descubrió que anhelaba ser diplomático. Es ahí que ingresó a la Academia Diplomática del Perú para estudiar todo lo relacionado a esa carrera. Una vez finalizado ingresó al servicio diplomático del Perú como tercer secretario.
En esta nota te explicaremos quien fue este ilustre hombre que dejó muy en alto el nombre del Perú ante el mundo sobre todo en tiempos de crisis dominados por la guerra fría entre Estados Unidos y la ex Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.
Como se dijo antes, Javier Pérez de Cuéllar fue un prestigioso diplomático quien tras ir escalando los diferentes grados que tiene el servicio diplomático peruano pudo llegar al grado de embajador.
Es aquí que se conoce su trabajo como embajador del Perú en Suiza, en la Unión Soviética, Polonia, Francia. Tras ello pudo ostentar el cargo de secretario general de la Organización de las Naciones Unidas desde el 1 de enero de 1982 hasta el 31 de enero de 1991. Durante estos casi 10 años tuvo que lidiar y dar soluciones una serie de conflictos que afectaron la tranquilidad del mundo.
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Como anécdota se conoció que Javier Pérez de Cuéllar anhelaba con demasiada firmeza obtener el puesto de embajador de Perú en Brasil y su congoja fue tal al conocer que no lo sería que hasta solicitó su retiro de la carrera diplomática en octubre de 1981. Lo que no imaginaría es que no solo se lo negarían, sino que además fue propuesto al cargo de secretario general de las Naciones Unidas.
El 11 de diciembre de ese año se conoció que el diplomático peruano, Javier Pérez de Cuéllar ostentaría el cargo de secretario general de las Naciones Unidas. No obstante, Javier Pérez de Cuéllar quien ya era un diplomático consagrado sin duda tuvo que enfrentar retos muy grandes como la guerra en Las Malvinas entre Argentina y Reino Unido, el conflicto armado en el Líbano y los problemas que nunca acaban en Angola.
En sus memorias ‘Peregrinaje por la Paz’ emitido por la Academia Diplomática del Perú, Pérez de Cuellar narra cada hecho que tuvo que enfrentar en los 10 años que ostentó el cargo antes mencionado. El primer gran reto de Pérez Cuellar fue la guerra de las Malvinas que inició en 1982 pero que pudo terminar ese mismo año cuando Argentina y Reino Unido dieron marcha atrás al fuego y pudieron ‘llegar a un acuerdo’. Otros conflictos no corrieron la misma suerte y uno de ellos fue la guerra entre Irán e Irak y el conflicto armado que se vive hasta hoy en Afganistán.
Otra de las guerras que se han vivido sin duda han sido la invasión turca a Chipre la cual se agravó con la independencia de la República Turca de Chipre del Norte en 1983. Tras esto y pese a tener su salud resquebrajada, Pérez de Cuéllar accedió a un segundo mandato dentro de la ONU, pero esta vez tuvo mucho más éxito que en la primera.
En esta oportunidad, pudo negociar con éxito el alto el fuego entre Irán e Irak, el fin de la guerra en El Salvador y la retirada de las tropas cubanas y sudafricanas de Angola en 1988 y de las soviéticas de Afganistán en 1989, así como la liberación en 1992 de los rehenes occidentales secuestrados por el grupo Hezbolá en Líbano.
Para los años 90, Javier Pérez de Cuéllar era ya un hombre muy conocido y por ello en 1994 decidió fundar el partido político Unión Por el Perú. Él fue el principal contrincante del entonces presidente, Alberto Fujimori. Sin embargo, éste último obtuvo en primera vuelta un total de 64% de votos para que continúe como jefe de Estado del Perú.
Tras los resultados finales, Pérez de Cuéllar se instaló en Paris donde años después sería embajador del Perú en el mencionado país de Europa.
No obstante, tuvo una gran oportunidad de reivindicar su labor diplomática cuando estuvo presente en el gobierno transitorio que lideró el desaparecido Valentín Paniagua del 22 de noviembre de 2000 al 28 de julio de 2001. Él ostentó el cargo de primer ministro y titular del Ministerio de Relaciones Exteriores.