Pedro Castillo es criticado por decir que hace 200 años las familias piden luz e internet para las escuelas
El presidente de la República volvió a cometer "un lapsus" durante su discurso en Chota, Cajamarca.
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El último viernes 24 junio, el presidente de la República, Pedro Castillo, visitó Cajamarca en el Día del Campesino. Durante su intervención, exhortó a dejar a un lado el “enfrentamiento inútil que le hace mucho daño al país”. Sin embargo, usuarios viralizaron una parte del discurso, donde el mandatario volvió a cometer un blooper.
En esta ocasión, el jefe de Estado se preguntó, cómo era posible que en esa ciudad se esté pidiendo luz e internet durante 200 años. Enfatizó que nuestro país "es rico" y que no era posible, que los y las peruanas continúen rogando por servicios básicos para vivir.
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“Cómo es posible que en 200 años nuestras familias salgan a las plazas a pedir el servicio de luz, a pedir el servicio de electrificación rural, a pedir agua para sus pueblos, a pedir una apertura de una trocha carrozable, internet para las escuelas”, reclamó, pese a que en esos tiempos ni la luz eléctrica, ni el internet aún no existían.
Sus declaraciones no pasaron desapercibidas para los usuarios en TikTok, quienes rapidamente subieron el extracto del momento para ponerlo en evidencia.
"¿Cómo es posible que en su comitiva, no haya personas que puedan instruirlo al señor Pedro Castillo?, ¿qué nos quiere transmitir con ese delirante mensaje?¿cree el señor Castillo que en su mitin concurren puro bobos?", escribieron en Twitter algunos usuarios.
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Hildebrandt critica a Pedro Castillo por su incapacidad de comunicación oral
El director de el Semanario de Hildebrandt en sus trece señaló que el mandatario perjudica la imagen del país ante su falta de preparación respecto a su forma de hablar cada vez que sale de viaje.
“Castillo, que encarna a la nación constitucionalmente hablando, nos avergüenza de modo multitudinario cada vez que decide viajar”, opinó César Hildebrandt.
“No merecemos un presidente que desperdició su vida y se dedicó a enseñar lo que no había aprendido (...). Si Castillo manchase el magisterio con su vasta ignorancia en una escuela de Tacabamba, eso sería una desgracia. Pero el daño tendría dimensiones comarcales y quizá hasta solución rápida: un cese fulminante. Sin embargo, es el presidente que el Perú hubo de elegir para no caer en manos, otra vez, de la mafia fujimorista”, añadió.