Una investigación interna de Facebook reveló que Instagram, plataforma la cual compró en 2012 por mil millones de dólares, contribuye a generar trastornos alimenticios y pensamientos suicidas en adolescentes.
Así lo dio a conocer Frances Haugen, quien hasta hace poco era responsable de Productos en la referida empresa, pero tras presencia irregularidades decidió filtrar documentos a The Wall Street Journal.
Fue el citado medio estadounidense, al que recurrió Haugen, que demostró que la empresa Facebook priorizó su crecimiento a costa de impactos negativos en los usuarios de las tres redes sociales bajo su mando.
Según explicó la ex trabajadora de Facebook, la corporativa es consciente de que el 13,5% de adolescentes que utiliza Instagram es afectado con pensamientos suicidas, mientras que el 17% en trastornos alimenticios.
"Lo peor es que el informe de Facebook señala que, a medida que estas mujeres jóvenes comienzan a consumir este contenido relacionado con dichos trastornos se deprimen cada vez más. De hecho, las hace usar más la aplicación", expresó Haugen.
Asimismo, indicó que la empresa Facebook no tomó ninguna medida restrictiva para evitar que en Instagram siga ocurriendo este tipo de situaciones. "Terminan en un ciclo de retroalimentación en el que odian sus cuerpos cada vez más", agregó.
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Como se recuerda, el pasado mes de marzo, Facebook anunció sus planes para crear una versión de la aplicación Instagram dirigida específicamente para menores de 13 años. Sin embargo, una semana después, decidió paralizar el proyecto.
"Claramente peor que otras redes sociales", concluyó Haugen. Curiosamente, un día después de haberse hecho esta revelación, las redes sociales de Facebook, Instagram y WhatsApp colapsaron en todo el mundo.