La lactancia: ¿sabías que no solo tu bebé se beneficia en esta etapa? 

Dar de lactar a tu bebé es el acto de amor más grande que se le puede dar a un hijo. Sin embargo, no solo el recién nacido es beneficiado, también la madre es muy bien recompensada. Durante este momento, se genera la relación de apego entre ambos, la cual es la base de la seguridad y confianza que necesita el pequeño para luego poder explorar el mundo que lo rodea.

Los especialistas de Huggies, señalan al darle pecho a un bebé se está haciendo mucho más que alimentarlo, se le da un abrazo, un consuelo, una caricia. Mientras que la madre recibe una sonrisa, una mirada de amor, es una forma de agradecimiento. Aquí una lista de beneficios para madre y bebé:

Para la mamá

1.- Acelera la recuperación después del parto, ya que se produce oxitocina, hormona que ayuda al útero a regresar a su tamaño original después del alumbramiento. Además de que reduce el sangrado postparto.

2.- Facilita la recuperación del peso, puesto que se consumen muchas calorías.

3.- Puede disminuir el riesgo de presentar cáncer de mama y de ovario.

4.- La depresión postparto es menos frecuente, y si se presenta es menos severa. Las hormonas relacionadas con la lactancia proporcionan a la madre una mayor sensación de tranquilidad.

Para el bebé

1.- Brinda la cantidad ideal de proteínas, azúcar, grasa y vitaminas que necesita para un crecimiento y desarrollo saludables.

2.- Disminuye la frecuencia y severidad de los cólicos.

3.- Lo protege de infecciones, ya que contiene anticuerpos. Los niños alimentados con leche materna son menos propensos a padecer cualquier tipo de infección como respiratorias o gastrointestinales.

4.- Reduce el riesgo de padecer alergias.

5.- La leche materna contiene ácidos grasos que promueven el desarrollo cerebral.

6.- Aporta beneficios emocionales por el vínculo especial que se desarrolla entre madre e hijo.

7.- Disminuyen las probabilidades de que desarrollen caries en la dentadura.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es recomendable amamantar exclusivamente con leche materna durante los primeros seis meses de vida y después complementar con otros alimentos hasta los dos años de edad.