Es imposible dejar de engreír a nuestros niños, tal vez con un dulce o largas horas de videojuegos, sin embargo, es importante tener en cuenta su salud, pues la mala alimentación y el sedentarismo hacen que 1 de cada 20 menores de edad en el Perú padezcan de diabetes.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) calcula que cada año 2.950 peruanos mueren por diabetes, mientras que la Asociación de diabetes del Perú estima que más de un millón de peruanos padecen de esta enfermedad crónica.
La nutricionista y docente Evelyn Paan, de la Facultad de Ciencias de la Salud, de la Universidad Católica Sede Sapientiae, nos brinda 5 principales consejos preventivos para que mantener sanos a nuestros hijos y puedan desarrollarse con total normalidad.
Mantener un peso ideal siempre deberá estar enfocado como un tema de salud y no estético. Por ello, la alimentación del menor deberá ser supervisado bajo las indicaciones de un nutricionista.
No considerarlas en su dieta diaria incrementa el riesgo de desarrollar diabetes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niños consuman cinco porciones de frutas y verduras cada día.
El ejercicio físico debe ser parte de su estilo de vida y no limitarlo al periodo de verano con “vacaciones útiles”. Hacer que practique algún deporte durante toda la semana en algún club o equipo es una opción. El tiempo que pasan frente al televisor, computadora o consolas debe ser limitado y controlado por los padres.
El objetivo es mantener el nivel de glucosa en la sangre lo más cerca de los valores permitidos por los doctores. Para ello, debemos asegurar una dieta adecuada, haciendo el conteo de calorías que ingerimos y limitando el consumo de alimentos ultraprocesados.
Si el niño tiene padres o familiares que hayan padecido diabetes, es importante que se hagan exámenes de sangre regulares para descartar que hayan heredado este mal.
- Aumento de sed
- Necesidad de orinar a menudo
- Sufrir incontinencia urinaria
- Sentir hambre extrema
- Fatiga
- Debilidad
- Visión borrosa
- Oscurecimiento de cuello, axilas e ingle.
La diabetes es una enfermedad que no tiene cura pero se puede controlar mediante una rutina alimentaria, con constante actividad física y con medicamentos supervisados de un especialista.
Ello requiere minuciosos cuidados debido a que pueden desencadenar otras enfermedades o incluso el fallecimiento del paciente.